Quiero ser tu compañía (omegaverse)

XII

CUAUHTÉMOC

Podía sentir su respiración agitada, su corazón latía muy rápido, se que el estar tan cerca lo puso nervioso y realmente no pensaba besarlo aunque me moría de ganas por hacerlo, solo quería ver su reacción y tal vez besar su mejilla pero sus nervios ganaron y se alejó; mientas hacía el pedido de las hamburguesas podía ver a Ari sonrojado abrazando a su hijo se veía realmente lindo, mi mente no dejaba de reproducir lo ocurrido hace escasos minutos, eso es lo más cerca que he podido estar de el y sin duda fue lo mejor.

Cuando llegaron las hamburguesas las recibí, las pague y lleve todo a la mesa, Ari seguía en la sala con su hijo que recién despertaba, le dijo algunas cosas que no entendí y el pequeño solo movió su cabeza negando y lo abrazó, cada vez que los veo así me doy cuenta de lo idiota que fue el padre de Xabiani al abandonarlos, apuesto que fue uno de esos intentos de alfa que solo saben embarazar pero jamás se hacen responsables de sus hijos. Mientras acomodaba la comida ví que Ari un par de veces intentó ponerse de pie con el pequeño en brazos pero en la última casi cae, sin pensarlo fui hasta el y lo detuve justo a tiempo para que no se lastimaran.

Temo: ¿Estás bien?
Aristóteles: Si
Temo: Estás débil, no lo puedes cargar o te vas a lastimar
Aristóteles: No quiere caminar
Temo: Pequeño (el niño lo mira) tu papá no se siente bien y no puede cargarte, si lo hace pueden caerse y lastimarse los dos, ve al comedor caminando por favor
Xabiani: No (abraza a Ari)
Temo: Yo puedo cargarte si no quieres caminar, pero tienes que prometer que no me vas a morder otra vez
Aristóteles: ¿Cómo que otra vez?
Xabiani: Te quiero papá
Aristóteles: ¿Que hiciste?
Xabiani: Te quiero (besa su mejilla)
Aristóteles: Sabes que no debes morder o pegarle a las personas
Xabiani: Te quiero (lo abraza)
Aristóteles: Debes disculparte
Xabiani: (mira a Temo) Perdón, ya no lo haré
Temo: ¿Quieres que te lleve a la mesa?
Xabiani: No, yo solo (se va)
Temo: Tu no puedes rechazar mi oferta (lo ayuda a levantar)
Aristóteles: Gracias
Temo: Debes cuidarte
Aristóteles: Hago lo que puedo pero con un cachorro así de inquieto las cosas son dificiles
Temo: Si estoy aquí puedo ayudarte a cuidarlo mientras comes o descansas, todos aquí te ayudaremos a cuidarlo, no somos como ellos que te dejaron solo con el bebé (lo deja en la silla)
Xabiani: Yo también
Temo: Ven (lo acomoda en su silla)
Xabiani: Gracias

Después de comer limpie la mesa y lave las cosas que usamos mientras Ari y Xabiani armaban figuras con bloques en la sala, se veían muy tiernos, recuerdo que cuando los conocí Ari tenía miedo hasta de cargarlo, la primer semana que vivieron conmigo yo cuidaba de ese pequeño y ahora verlos juntos jugando, riendo o ese amor con que Ari lo mira es algo único y pensar que yo llegue a plantearle el dejarlo en un orfanato, es bueno que no me hiciera caso porque definitivamente ese niño solo podría ser feliz con el chico que le dió la vida y que lo ama como a nadie más.

Xabiani: ¿Quieres uno? (Le da un carrito)
Temo: ¿No me vas a morder si lo agarro?
Xabiani: No jajaja
Temo: Está bien (toma el carrito)
Xabiani: Ven a jugar, papá es ese (señala un carrito)
Aristóteles: ¿Que color es?
Xabiani: No sé
Aristóteles: ¿Seguro que no sabes?
Temo: (susurra) Es rojo
Aristóteles: No le digas
Xabiani: Rojo
Aristóteles: Tramposo
Temo: ¿Que color es este? (Le muestra un carrito)
Xabiani: Azul
Temo: No
Xabiani: Si
Aristóteles: Es verde
Xabiani: Ese
Temo: Es muy inteligente
Aristóteles: Supongo su papá lo es, mamá y yo no lo somos tanto
Temo: Mentiroso, escuché una plática de Pepe y mi papancho dónde le hablo de ti, ya se que tienes muy buen promedio y que es porque eres de los mejores estudiantes
Aristóteles: Solo lo he conseguido estudiando mucho, muchas veces cuando el se duerme yo me quedo estudiando, creo que de esa forma puedo agradecer a tu papá lo que hace por nosotros
Temo: Eso es cierto, aunque si tus calificaciones fueran de 6 el igual estaría feliz, sabe que incluso un 6 que para otros no es nada puede tener mucho esfuerzo detrás, el lo festejará y te motivará a ser mejor
Aristóteles: ¿Por qué tú no estudias?, ¿Te iba muy mal?
Temo: No, con menos esfuerzos mi promedio era igual al tuyo, como mínimo obtenía 8 pero no me gustaba tanto, a los 15 mi hermano me regaló una cámara y ahí descubrí lo que quería hacer, aprendí a sacar fotografías, a grabar en mejores ángulos y a editar lo mínimo conservando la escencia y naturaleza de cada foto, cuando termine la prepa hablé con mi papá y le expliqué eso, el me apoyó y tomo diferentes cursos para mejorar mi trabajo
Aristóteles: Lo haces muy bien, a mí me gustan tus vídeos
Temo: ¿Los ves?
Xabiani: ¡Papá!
Aristóteles: Me llaman en las escaleras (se va).