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Toqué la puerta de la habitación de Jungkook y abrió sin mirarme. Había ropa en la cama, él estaba vaciando la mitad de su closet para poder colocar la mía. Jungkook suspiraba mientras volvía a meter las pilas de ropa a la mitad de su closet. ¿Por qué me sentía tan mal?

-Jungkook.

-Qué.

-Perdón no quería hablarte de esa manera.

- ¡Pero lo hiciste Taehyung!

-Jungkook. – tomó el rostro del pelinegro con ambas manos. -Lo siento, me sentí muy raro verte en los brazos de otro hombre, me jodio los sesos. No pude controlar mi enojo.

- ¿Estabas celoso?

-Talvez.

- Taehyung...

-Solo recuerda que tú eres mío. Dime como te sentiste cuando la perra de Suni me beso.

- Ni siquiera lo menciones.

-Ahora entiendes.

-Mh. – escondió su rostro en el cuello del castaño. – Prometo que no volverá a pasar.

- Terminemos de acomodar y limpiar. ¿Qué dices?

- ¡Si! - se alejó del castaño para velo a los ojos. – A demás quiero que vallamos a comprar unas cosas, también encontré la tienda donde podemos comprar los pijamas.

- ¿En verdad quieres comprarlas?

-Si, no puedes quejarte por que aceptaste.

- Está bien, está bien. Pero pasemos a mi casa por algo de dinero, y para traer las cajas donde está mi ropa.

Jungkook asintió mientras sonreía. Acomodamos todas las cosas de Jungkook, también sacó algunas prendas y cosas que ya no utilizaba para donarlas. Tiro a la basura cosas que ya no funcionaban o que jamás volvería a utilizar, me acerque a su mesita de noche para dejar mi teléfono, sentí una punzada al ver la rosa de papel y la nota que le había dejado cuando limpié su casa antes de irme al hospital.

- ¿Qué opinas amor?

- ¿Qué?

- ¿En qué piensas?

-En nada, ¿qué pasa?

-Está bien. – comienza a juguetear con el cabello castaño. – Te decía que si conseguíamos una cama más grande y mi cama la pasamos al cuarto de invitados.

-Jungkook gastaríamos más, además tu habitación no es tan grande.

-Pero sería mucho mejor, estaríamos mucho más cómodos.

-Tienes razón, si tenemos una cama más grande no dormirás encima de mí.

- ¡¡Amor!!

Jungkook me dio un golpe en el hombro, yo jalé de su mano para que cayera en mi regazo. Y le hice cosquillas. Jungkook se retorcía mientras pedía que parara. Me acerqué y besé sus labios.

-Si quieres una cama más grande la comprare para ti.

-Gracias, pero no tenemos que comprarla, Jin me platico que él y Nam se mudarían a una casa más grande y que su cama sería muy pequeña para habitación y van a comprar una más grande, podría decirle que me la de para que no la tire.

-Esos dos desperdician su dinero, su casa actual está bien.

-Amor eso no importa.

- ¿Pero por qué una cama usada? Puedo comprarte una cama nueva.

- Taehyung no me molesta. Podemos hacerla parecer nueva, podemos pintar la base y mandar a que arreglen el colchón.

-Jungkook...

- Amor por favor.

No podía decirle que no.

-Está bien, pero tu limpia el otro cuarto.

-Pero Tae...

-Pero nada.

Eso era lo justo. 

¿Eres mi princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora