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Suspire mientras caminaba al patio de la escuela. Todavía faltaba para que las clases concluyeran, me senté en el pasto y comencé a leer uno de los libros que el profesor estúpido me dio, el leve viento chocaba en mi cara, eran tan refrescante, levante un poco el rostro para poder sentirlo un poco más.

-T-taehyung...

Abrí los ojos poco a poco y Jiho estaba enfrente de mí, sus mejillas en seguida se pusieron rojas. ¿Él que hacía aquí?

-T-taehyung como sigue tu mano.

-Bien.

-M-me alegro mucho e-ese día no dejaba d-de sangr...

- ¿Qué haces aquí?

-Y-yo me perdí y entre para buscar ayuda y t-te vi...

-Entiendo, siéntate después de clases voy a ir con unos amigos, puedo dejarlos y llevarte a tu casa.

- ¿E-en verdad?

- Si.

- ¡G-gracias!

Jiho soltó una risita, mientras ocultaba su rostro. Este niño desde que lo conocí me dio mucha ternura, revolví su cabello él se quedó totalmente quieto, levantó poco a poco su vista, tenía la cara demasiado roja.

- ¿Estas bien?

-Y-yo si...solo que n-nunca te había visto sonreír.

En seguida quite mi mano de su cabello y mire a otro lado, joder ni siquiera Jungkook que me había visto sonreír, quería que el fuera el primero en ver mi sonrisa. Un audífono se supo en mi vista levante la mirada y Jiho estaba acomodándose el otro audífono.

- ¿Quieres oír música conmigo?

Tomé el audífono y seguí leyendo. Jiho buscaba algo en su celular. La canción comenzó a reproducirse, Lacrimosa de Mozart, mire de reojo a Jiho, él estaba viendo una foto.

- ¿Quiénes son?

Pregunte fingiendo no estar mirándolo, Jiho no decía nada, pero me mostró la foto.

-Mis padres murieron hace tres años, cuando ellos murieron mi abuela me corrió de mi casa... estuve mucho tiempo viviendo en la calle, hasta que obtuve un trabajo, cuando junté el dinero suficiente pude rentar un pequeño cuarto de azotea, la dueña no quería rentármelo apenas tenía 13 años, después conseguí el trabajo en el restaurante, pero me cambiaron a la cafetería cuando tú llegaste, esa fue la primera vez que te vi...

- ¿Cuantos años tienes?

-16 años.

-Me sorprendes, eres alguien muy fuerte a pesar de tu edad.

-Vivir en la calle nunca me permitió rendirme o ponerme a llorar...

-Tranquilo...

-Taehyung tenía tanto miedo, pero le prometí a mis padres que lograría ser alguien en un futuro.

- Después de clases quiero que vallamos a un lado...

- ¿P-pero y tus amigos?

-Ya volviste a tartamudear.

Jiho cubrió su boca. Estuvimos un buen rato platicando, él era un niño muy inteligente, me contó cómo fue que se perdió. El tiempo había pasado tan rápido.

-Espera.

Saque mi celular que había comenzado a sonar. Era Jungkook.

- ¿Amor dónde estás?

- ¿Ya están en la cafetería?

-Si, solo estamos esperándote.

-De acuerdo voy para allá.

Mire a Jiho, él ya estaba guardando sus cosas.

-Vamos.

(...)

-Taehyung estuvimos esperándote...

Jungkook se quedó quieto al ver a Jiho escondido detrás de mí.

-Jiho ellos son mis amigos y él es mi novio. - señala al pelinegro. - Chicos él es Jiho trabaja conmigo.

-Mucho gusto Jiho, yo soy Jimin y él es mi novio. -Jala al de piel pálida. – Saluda.

-Min Yoongi. – extiende su mano.

-Sim Jiho.

Jungkook miraba de pies a cabeza a Jiho, y el volvió a esconderse detrás de mí.

-Vamos Jin se enojará si llegamos tarde.

Jimin tomó de la mano a Yoongi, Jungkook tomo la mía y con la cabeza le indique que nos siguiera, llegamos al estacionamiento y subimos al auto. Saqué mi celular para poder ver la dirección que Namjoon me había mandado. Jimin y Yoongi se durmieron, Jigo miraba por la ventana y Jungkook me contaba algo. No le estaba prestando atención para ser honesto, quería que Jiho ocupara mi habitación en casa de mi padre, tal vez si le contara lo que pasó Jiho le permitiría quedarse ahí, yo me haría cargo de que el estuviera bien. Aún era un niño, no podía seguir viviendo en un cuarto de azotea.

-Taehyung. -dijo el pelinegro molesto. - ¿Me estas escuchando?

-Lo siento.

Jungkook solo suspiro y miro al frente, Jungkook en casa me exigiría una respuesta, claro que iba a dársela. Después de 10 minutos llegamos a la casa de Nam y SeokJin, era una casa de 2 pisos, color blanco, una casa realmente bonita.

-Chicos pensé que tardarían más en venir. -dijo SeokJin. – Pasen quiero mostrarles toda la casa, aun no terminamos de desempacar.

-Chicos yo en un momento vuelvo.

- ¿A dónde vas?

Pregunto Jungkook mientras me miraba molesto.

-Necesito llevar a Jiho a su casa.

Jungkook miro a Jiho y después miro a otro lado.

-Pero te perderás la carne asada. – dijo Namjoon.

-Guarden un poco para mí.

Tome a Jiho del hombro para que regresara al auto, Jungkook entró en seguida en la casa, solo esperaba no tener una pelea con él.

Jiho me iba diciendo por donde tenía que ir. Su casa estaba un poco lejos de la escuela, no entiendo cómo es que llego ahí. Estacione el auto frente a un edificio no muy grande y comenzamos a subir las escaleras hasta el último piso. El cuarto tenía una pequeña ventana y una pueta de metal vieja, por dentro tampoco estaba mal, apenas y era perfecto para él.

-T-tengo un p-poco de ramen...

Yo solo asentí con la cabeza y me senté en el suelo donde estaba una pequeña mesa, 5 minutos después Jiho coloco 2 platos y 2 juegos de palillos.

-No tenías que traerme... esto no es nada con lo que tu amigo había preparado.

-Cállate y come.

Le día a Jiho un plato con ramen, el solo lo tomo y comenzó a comer en silencio.

- ¿Jiho todas las cosas de aquí son importantes para ti?

-N-no.

-Véndelas y empaca todo lo que necesites.

- ¿Q-qué?

-Hazlo.

-P-pero Taehyung.

-Te llevare a vivir a un mejor lugar.

- ¿Q-qué?

¿Eres mi princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora