¿Eres mi princesa?

20

Una fuerte pulsada de dolor hizo que me doliera mucho la cabeza, logró oír un leve pitido, me duele todo el cuerpo, trato de visualizar en donde me encuentro, pero no puedo lograrlo.

-Jungkook. – dice en un susurro seokJin. - Por fin despertaste, espera un momento si iré a avisar a un médico.

Estaba confundido ¿Por qué demonios estaba en un hospital? ¿Qué rayos había pasado? No es como si hubiera perdido la memoria, solamente no podía recordar que fue lo que pasó y que fue lo que me llevó hasta aquí. Entró un médico y atrás del jin.

-Muy Buenos días joven Jeon. -dijo amable y con una sonrisa. - Bien no tienes nada grabe más que los golpes y cortadas en tus brazos y cara, lo único grave fue la cortada en tu mano, la vendamos vas a recuperarte pronto.

Asentí con la cabeza, Jin salió con el doctor para firmar unos papeles y así poder salir de aquí, si por mi fuera yo ya me hubiera ido, estar aquí me hace sentir tristeza y soledad, odio sentirme así.

- ¿Puedo pasar?

Esa voz, al levantar el rostro vi a Kim Taehyung frente a mí, comenzó a doler me la cabeza y llegó el recuerdo, pude recordar el por qué estaba aquí, él tenía la culpa.

-Taehyung vete. - dijo Jungkook de manera fría y seria. - Por favor vete.

-No. -contesto firme. - Necesito hablar contigo.

-¡¡Joder lárgate no quiero verte!! ¡POR FAVOR VETE!

Jin entro enseguida a la habitación y saco a Taehyung.

- ¿Taehyung que es lo que pretendes?

-Escuche lo que Jungkook te decía cuando fuiste por el a la escuela, quiero pedirle que sea mi novio.

-¡¡¡¿Que?!!!


(...)

-Jungkook se mi novio.

Taehyung entró a la habitación, estaba totalmente sorprendido por lo que Taehyung había dicho. ¿En verdad quería que fuéramos novios?

- ¿Aceptas? -dijo serio. -Jungkook dime algo.

-Y-yo sí quiero ser tu novio.

¿Estaba loco?, si definitivamente estaba loco, pero Kim Taehyung estaba frente a mí, pidiéndome que aceptará salir con él, joder era la gran oportunidad de mi vida y ahora que Taehyung estaba a mi lado no lo dejaría ir jamás.

Taehyung se acercó y me abrazo, el besó mi frente, nada podía salir mal ¿cierto?