¿Eres mi princesa?

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- ¿Y no pudiste decírmelo?

-Jungkook estabas matando a Jiho con la mirada.

-Lo siento, pero me sentí tan mal de ver a mi novio con un niño bonito.

-Jungkook...

-Por un momento llegué a pensar que tienes algún tipo de fetiche con chichos menores que tú y bonitos, y no podemos negar que él es extremadamente lindo y bonito.

- ¿De dónde sacas esas ideas?

-B-bueno en la escuela dicen que tu...

- ¿Y tú crees lo que dicen?

-No, pero tú siempre estas rodeado de chicos y chicas que son hermosos y me siento intranquilo, pero después recuerdo que a ellos no les hablas como me hablas a mí, que no los miras como me miras a mí, que no los tratas como lo haces conmigo, pero verte siendo tan amable con Jiho me hizo pensar muchas cosas...

-Jungkook por algo estoy contigo no lo crees, me gustas, estoy viviendo contigo, has sido el único que ha estado conmigo en todos los sentidos y posiciones.

- ¡Taehyung! -le da un golpe en el hombro al castaño.

-Lo que quiero decir es que, siempre serás tú el que recibirá mis palabras de amor, cada una de mis miradas llenas de amor serán para ti, no eres como los demás, eres especial para mí, tratarte como los demás sería como si te insultara, Jungkook significas mucho para mí, por favor deja de pensar en cosas estúpidas estoy tratando de cambiar por ti, para ti quiero sentir que realmente te merezco...

-Taehyung...

Jungkook me abrazó, mis brazos lo rodearon apretándolo un poco, esparcí besos por su cabeza.

-Amor tu corazón está latiendo muy rápido, puedo oírlo.

-Late de esa manera solo por ti.

Jungkook soltó una risita mientras volvía a pegar su oreja a mi pecho.

-Amor olvidé la carne que Nam guardo para ti.

-No importa, no tengo hambre. – acaricio la mejilla del pelinegro. – Puedes darme un poco de ese postre que hiciste la otra vez.

- ¡Taehyung te lo comiste todo!

- ¿Puedes hacer un poco más para mí?

-Sí, sabes que lo haré más delicioso esta vez te encantara.

Jungkook salió corriendo a la cocina, negué con la cabeza y fui tras de él, parecía un grillo de un lado a otro de la cocina, me recargué en el marco de la puerta de la cocina, Jungkook estaba tan concentrado en lo que estaba haciendo, el timbre de la casa sonó, me pareció raro ya que no esperábamos a nadie.

- ¿Esta Jungkook?

- ¿Qué haces aquí?

Yugyeom estaba parado enfrente de mi con un gran ramo de rosas.

-Jungkook me pidió que viniera, y me dijo que quería unas rosas.

¿Jungkook le pidió rosas a este hijo de puta? Hace una hora me pidió que le comprara flores, le quité el ramo de rosas y le golpee la cara con ellas, viendo como las espinas le hacían rasguños en la cara.

- ¡Ey Taehyung que sucede contigo!

Genial, estaba tan bien con Jungkook y ahora tendremos una discusión, me miró para que me hiciera a un lado y los dejara pasar, él le había tomado la mano a Yugyeom, solté un gran suspiro y me hice a un lado, salí de la casa azotando la puerta, patee un bote que estaba afuera, camine alejándome de casa, solo daría una pequeña vuelta y cuando vuelva ese estúpido ya se habrá ido.