Duelo

Ira parte 12

La imagen que la Overlord de menor estatura le mostraba no podía tratarse de otra cosa que no fuera una broma casi perfecta pues no era posible que de otra manera lo visto en la pantalla de su teléfono pudiera considerarse como un hecho factible, debía ser un simple montaje, un cuidadoso y casi creíble montaje, o quizás se trataba de una distorsión mal interpretada debido a la agrietada lente de su ojo herido. La simple idea de que seres tan antagónicos fueran capaces de convivir de manera civilizada en un ambiente expuesto era posiblemente de una en un millón, era más aceptable creer que dentro del territorio de la futura gobernante o dentro de las cuestionables instalaciones del hotel pudiera darse ese tipo de cercanía al encontrarse resguardados del ojo ajeno y siendo obligados por la falta de participantes que pudieran ofrecer una mejor conversación fuera de comentarios obscenos o chistes estúpidos, pero definitivamente no era algo que pudiera suceder en el exterior.

Si conocía bien al demonio de la radio, y vaya que se conocían luego de haberse pasado discutiendo durante más de 30 años para ver quién era superior al otro y por qué, además de los múltiples "ojos" que mantenía sobre el ciervo cuidando cada paso que daba esperando obtener cualquier dato que le fuera de utilidad para utilizarlo en su contra, destruir su imagen o arrebatarle parte de sus poderes y territorios, era de conocimiento público que las habilidades sociales de su némesis eran bastante reducidas llegando al punto que eran casi inexistentes referente a lo que fuera relacionarse con individuos ajenos a su época o intereses, siendo las únicas criaturas con las que lograba mostrarse cortés, un verdadero caballero, seres de apariencia frágil o las damas.

Angel Dust no debería de entrar en ninguna de esas categorías desde su punto de vista, reafirmando sus dudas respecto a la supuesta prueba entregada.

- No puede ser el mismo cornudo de mierda – se negaba a creer que algo así pudiera ser real – la perra de Dust no puede ser capaz de relacionarse con un Overlord de su nivel, menos con ese maldito apretado del siglo pasado – aumentó el zoom de la imagen tratando de encontrar algún indicio que le ayudara a desmentirla – muñeca, ¿estás completamente segura que el otro demonio es el venado?

- ¡Absolutamente! – exclamó energética – luego de que salimos del supermercado y de que Jaws me hiciera correr sin rumbo los encontramos dentro de ese callejón.

- Nena, voy a necesitar que me cuentes todo con más detalle – señaló la pantalla con su índice – necesito saber, ¿cómo demonios es esto siquiera posible?

- Para mí también es algo imposible de creer, pero puedo asegurarte que lo que ves en mi teléfono es exactamente lo mismo que nosotros – señalándose a sí misma y al escualo – vimos, pero si necesitas más pruebas te contaré los detalles de cómo los encontramos – dijo tomando una gran bocanada de aire – verás, salimos de la tienda esa que está a unas cuadras de tu apartamento, llevaba la correa de tiburoncin en una de mis manos y la bolsa de la compra en la otra y yo estaba súper emocionada porque logré conseguir una de esas cajas de cereal que vienen de los otros círculos infernales, ya sabes, la que tiene a ese bufón adornado la tapa y viene con un premio dentro, que desde hace un tiempo quería probar y ustedes no me dejaban comprar diciéndome que era demasiada azúcar, nada saludable, que no apoyara a tu competencia y esas mierdas – hablaba tan rápido como le era posible – pero ya sabes que me encanta llevarles la contraria sólo para ver esa expresión que hace Valentino cuando me ve haciendo cosas que se supone no debería de hacer ¿recuerdas la cara que hizo la vez que me vio comiendo esa paleta que encontré en el suelo? – agrandó sus ojos con sus dedos para enfatizar – esa donde sus ojos se abren por completo y lo hacen lucir tan gracioso ya que me recuerda a las expresiones de los personajes de las animaciones japonesas, me recuerda a esas monitas que tienen los ojos grandes y brillantes abarcando casi un 80% de su cara – entre más hablaba más se desviaba del tema principal – aunque no es algo que me moleste del todo ya que adoro las series de chicas mágicas o esas centradas en – le interrumpieron.