Negación parte 13

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Angel

Había accedido a acompañar a Alastor para ayudarle a elegir un regalo apropiado para su amiga, Rosie si mal no recordaba, con la esperanza de poder recorrer durante horas y horas la gran mayoría de las tiendas del centro comercial comprando dos o tres cosas de cada una de las que visitaran, probablemente descartando algunas opciones en el proceso, hasta dar con el correcto, lo típico de una salida de compras, pero no, eso no sucedió. El demonio de los años 30 le había encaminado a un distrito de compras ubicado a una distancia considerable, aunque no por ello muy segura, del distrito caníbal donde gran mayoría de los negocios se dedicaban a la venta de carnes, algo bastante esperado, algunas cafeterías, boutiques especializadas en trajes de época y tiendas de antigüedades.

Estaba verdaderamente sorprendido al ser la primera vez que visitaba un lugar como ese, siendo la principal razón que solía estar prohibido para personas que no pertenecieran a ese grupo para evitarse las bajas innecesarias, su mirada iba de un lado a otro tratando de captar cada detalle que tuviera a su alcance y la cámara de su teléfono se encargó de tomar fotografías que no dudaría en compartir con Cherrie y su pequeño Fat Nuggets, al cual agradecía que Alastor no le permitiera traer con ellos pues hubiera sido seguro que alguien saltaría a devorar a su cerdito al primer descuido.

Varios de los tenderos ofrecieron cordiales saludos y algunas muestras de carne para el demonio de la radio, mismas que rechazaba de manera educada, mientras que las encargadas de las tiendas de ropa ofrecían algunas muestras de perfumes para el joven actor. A cada paso que daban el ciervo ofrecía reverencias a las damas que pasaban a su lado provocando que escondieran sus rostros detrás de sus abanicos de tela para no dejar en evidencias los sonrojos ocasionados por la galantería del Overlord, una risilla escapo de labios de Angel al verle actuar de forma tan educada con las señoritas a pesar de la conocida asexualidad del mismo. Caminaron durante unos cuantos minutos más hasta llegar frente a uno de los locales de antigüedades, el demonio de rojo se adelantó a su compañero abriéndole la puerta permitiéndole pasar primero y él justo después cerrando la puerta al ingresar, acercaron sus pasos al mostrador donde Alastor hizo sonar la campanilla colocada sobre el cristal permitiendo que la encargada del local, una demonio de apariencia de muñeca, se presentara ante ellos ofreciendo en primera instancia un saludo antes de cuestionar el motivo de su visita.

El ex locutor solicito que le mostrara alguno de los juegos de la porcelana más fina que tuviera a su disposición por lo cual la joven tomo una de las cajas colocadas encima de la repisa tras ella permitiéndoles admirar un elegante juego de té, con azucarera y cremera incluida, en tono crema con decorados de girasoles, volteo a ver al albino pidiéndole su opinión sobre la porcelana a lo que Angel no dudo en decirle que si bien era bastante linda era casi seguro que podrían encontrar algo mejor, dando un rápido vistazo enfoco sus ojos en uno blanco con degradados de lila a blanco y decoraciones de oro puro incluyéndole una base para postres de tres niveles. Al darle su sugerencia el Overlord dio su visto bueno solicitando que le envolvieran la caja para regalo y lo enviaran de inmediato a la casa de su mejor amiga, la joven encantada agradeció su compra y les felicito por su buen gusto en elección afirmándole que su pedido sería entregado en un par de horas, se despidieron de la tendera antes de salir de su negocio.

Realizar su encargo había terminado en algo bastante sencillo, no pasaron ni cerca de una hora en ello, y aprovechando que aún tenían algo de tiempo y no deseaban volver tan pronto al hotel el ciervo se ofreció ahora a acompañar a la araña a realizar sus propias compras, solo si el más joven así lo deseaba. La idea fascino al actor por lo que le dijo que deberían caminar de regreso a la ciudad para poder llegar al centro comercial que tanto le gustaba visitar, no necesito decirlo dos veces antes de desaparecer de un chasquido y aparecer frente a las puertas cristalinas del lugar gracias a los poderes de Alastor, de igual manera Angel no tuvo que mirar por segunda vez antes de tomar la muñeca del ciervo y arrastrarlo dentro para iniciar con sus propias compras.

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