04.

3.2K 250 70
                                        

          LEE EUN HYUK

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

          LEE EUN HYUK.         

━━━━━━━━━━━━━━

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

━━━━━━━━━━━━━━

FUE INESPERADO DE PRONTO estar rodeado de un montón de gente desconocida, gente que a partir de ahora sería parte de nuestro grupo de supervivencia. Pero, fue aun mas inesperado que la primera escena en presenciar apenas si nos unimos al grupo fuera tan sangrienta.

No podía siquiera hablar o moverme. No cuando la escena frente a mis ojos era tan parecida a mi pasado tormentoso. Tan idéntica, que sentía volver a estar viviéndola. Me vi a mi misma nuevamente arrinconada en un rincón, observando a la sangre salpicar a todos lados, mientras el rostro del hombre en el suelo se desfiguraba con cada martillazo, tal y como el de mi madre. Y otra vez, nadie hacía nada, ni siquiera yo.

Todavía no moví cuando abrió la reja y arrastro el cuerpo hacia la calle, con la lluvia cayendo a montones. Ni cuando Jae Hun apareció para incitarlo a vivir, para dejarle estar con nosotros a pesar de la espantosa y traumada escena que habíamos presenciado. Comprendí que debía ser por algo. Jae Hun no dejaría estar con el grupo a alguien malo. Mucho menos cuando ambos lloraban. Tenía que existir un por qué justificable.

Mas, aun así, mi estado no estaba bien.

Recordar. Odiaba poder hacerlo.

Me estire el corto cabello una y otra vez iniciando a llorar nuevamente, con la mirada del resto puesta en mí, como si viesen a una loca. Tal vez no estaban tan confundidos ene se aspecto.

ㅡ Noona, ¿Por qué no pueden traer a papá?

ㅡ No pueden traerlo porque sería muy doloroso para nosotros.

Me mantuve recargada en la caja, con la mirada perdida y mis ojos iniciando a llorar. Una de las mujeres del grupo entró, con un bote de agua y un trapo, no dudo en acercarse al niño para limpiarlo, pero noté a sus lágrimas también salir, el pequeño las limpio con su pulgar y cuando se abrazaron, sus lágrimas salieron sin fin, en un llanto de ambos.

No pude contenerlo más y terminé llorando en mi lugar, hipando, gritando, sollozando, como una niña. Porque había recordado a la muerte de mi madre y seguía torturándome como el momento mismo en que lo viví.

Sweet Home (Lee Eun Hyuk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora