Jun Alice tenía un deseo. Uno que incluía a su padre y a su traumático pasado, pero antes de poder cumplirlo algo sucedió. Algo que comenzó a acabar con el mundo lentamente, apenas dejándola pensar y consumándola por completo. En una lucha entre mon...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
UN CAMBIO EN EL GRUPO.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
━━━━━━━━━━━━━
APARECIMOS JUSTO EN EL MOMENTO exacto en que el resto del grupo llegaba, deteniéndose al otro extremo de donde Eun Hyuk y yo estábamos uno junto al otro. Eun Hyuk había tomado un bate en el camino, pero no se acercó atacar de inmediato, se mantuvo inspeccionando el porqué del llamado, aunque fue demasiado obvio cuando algo comenzó a moverse. Estaba rodeado de pelo y gruñía bajamente, la poca piel que se veía estaba roja, delatando su monstruosidad. Comprendimos que se trataba de Seok Hyeon, que era un hombre que estaba infectado y se encarcelaba junto a Hyun Su.
Nadie tuvo el coraje de dar un paso, todos soltaban quejidos de sustos. Sang Wook, que miraba recargado en una pared, dio un paso con intenciones de hacer algo, pero Seo Yeong lo detuvo, sosteniéndolo de un brazo, con una mirada perdida en lo que ahora era su esposo.
ㅡ Es mi esposo ㅡ esas simples palabras nos dejó a todos comprender el significado ㅡ. Yo tengo que hacerlo.
Intentaron detenerla, pero ella continúo avanzando. Incluso Eun Hyuk no se movió. Yo estaba a su lado presenciando la escena, mirándolo de reojo para tratar de descifrar sus pensamientos, pero no encontré nada.
ㅡ Ten dignidad Kim Seok Hyeon. Kim Seok Hyeon ㅡ su voz se alzó, y tomó con fuerza el tubo de metal que mantenía sujeto ㅡ ¡Ten dignidad!
Y dio el primer golpe. Lo que ahora era Seok Hyeon se quejó entre jadeos y ronquidos, pero seguía de pie. Parecía volver a ser él otra vez.
ㅡ Volviste ㅡ de entre el cabello se asomaron los ojos oscuros del hombre, respirando con dificultad ㅡ ¿Alguna última palabra?
El silencio era impresionante, todos conteniendo la respiración.
Las palabras parecieron desatar algo en la mujer, que tomando aire dio otro golpe, y otro, y otro, y muchos más. No se detuvo aun con el crujido del cráneo, la sangre esparciéndose y las manos del hombre temblando hasta quedarse quietas para siempre. Du Sik cubrió los ojos de los niños, mientras el resto intentaba apartar la vista de igual manera, soltando quejidos de dolor con solo ver.