Boiling Islands Village es un pequeño pueblo rodeado de un inmenso bosque, con pocos habitantes y en donde nunca sucede nada interesante.
Entre esos habitantes se encuentran Luz Noceda y Amity Blight, dos chicas que no se llevan bien y que hacen to...
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- Y luego ese pequeño diablillo abrió por error una de las carpetas secretas que tengo ¡y casi la borró! -. Me quejaba al mismo tiempo que me ponía mi camisa blanca para Educación Física.
En este momento me encontraba en los vestidores del gimnasio, rodeada de chicas de mi clase y del salón 2°C en ropa interior y soltando risillas ridículas. Y no, no estaba viendo a ninguna de esas chicas, en especial una linda castaña de buenos pechos sentada en la banca a un costado mío. Para nada, yo no hago eso. Yo soy un pan de Dios.
Willow y yo éramos las que estábamos más apartadas de todas, ya que la primera prefería cambiarse dentro de los baños con la excusa de que "no tenía necesidad de cambiarse frente a otras personas". Aunque claro, yo tenía otros datos al respecto. Debido a la lejanía me era bastante más fácil poder conversar con ella sobre mi querido huésped demonio.
Escuché como Willow soltaba una risa detrás de la puerta del baño.
- No te puedes permitir perder tu porno -. Dijo al mismo tiempo que soltaba otra risa burlona.
- ¡Que no es porno! -. Le espete entre susurrando y gritando cuidando de que nadie más escuchara - al menos no todo... -. Admití en un susurro aún más bajo pero que Willow llegó a escuchar ya que soltó otra risa - pero también tengo evidencias de ti y Gus que bien podría utilizar como chantaje.
- Yo también tengo mucho material que puedo usar contra ti, Noceda -. Cotraataco, y aunque no la veía, estaba jurando que tenía una sonrisa malvada sobre sus labios.
- Bueno, ese no es el punto -. Cambie de tema con rapidez - aquí la cuestión es que mi madre me preguntó que que eran todos esos chillidos y tuve que inventar que estaba viendo "mis cosas de monos chinos" -. Hice unas comillas ante esto último - creo que no me creyó.
- Creo que a estas alturas es mejor que tu madre piense que estas viendo porno a que se entere que tienes a un demonio viviendo en tu habitación -.
La chica salió del baño ya completamente vestida con el uniforme de la clase -que básicamente solo consistía en una camisa blanca y unos shorts deportivos de color azul-. Aquí la cuestión es que la camisa de Willow era más holgada, literalmente le quedaba dos tallas más grande. Ella decía que era por comodidad, pero eso no era cierto.
Pero tampoco le iba a decir nada al respecto.
- Supongo que tienes razón -. Me encogi de hombros mientras guardaba mi ropa en la mochila - y no sería la primera vez...
Me estaba asegurando de que mis agujetas estaban bien amarradas para no estamparme la cara contra el suelo -créanme, ya a pasado muchas veces- y no pude evitar escuchar la conversación que un par de chicas de mi salón estaban teniendo a unos pasos de mi.
El famoso escándalo de cómo le pusieron el cuerno a Amity Blight.
No había rincón donde no se escuchara hablar sobre eso, literalmente sólo faltaba que el chisme llegara a oídos de los profesores y que estos también se pusieran a debatir sobre esto. ¡Dios! Hasta los otakus habían dejado de hablar sobre la última temporada de Attack on Titan -y como otaku que yo también soy, aprovecho para decir: ¡chinga a tu madre, Gabi Braun!-.
