III.III

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Cuando llegaron a la casa de Hoshi su madre lo recibió con gusto, la señora le sonrió alegremente y lo llevó directo al comedor, ella tenía la mesa repleta de comida, tan llena que apenas dejaba espacio para que pudieran comer. Jihoon lo miró asombrado mientras que Hoshi se acomodaba como siempre. La hermana mayor de Hoshi llegó segundos despues mirando con la misma sorpresa el comedor. Y cuando el padre de Hoshi llegó soltó un gemido asombrado.

—¿Cuántos Jihoonies invitaste?— Preguntó la hermana de Hoshi examinando la mesa. —¿se podrán comer todo esto?

—Nuestro Jihoonie tenía hambre, así que cocine lo mejor que pude.— Respondió la mujer sentándose junto a su esposo. —Come sin pena, querido, hay suficiente para todos.— Le dijo directamente.

Jihoon asintió con una sonrisa. Le gustaba la familia de Hoshi, ellos siempre eran amables y siempre había un lugar en su mesa para quien lo quisiera. En su casa no era así, su madre tenía las camas contadas y nadie más cabía en ella, por esa razón Jihoon invitaba muy pocas veces a Hoshi a su casa cuando estaban sus padres cerca, a ellos solo les gustaban sus propias visitas, no las de Jihoon. Estaba bien, de cualquier modo no quería que Hoshi estuviera cerca de tanta negatividad, menos cuando su familia era cálida.

—¡oh! Mamá, mis clases de mañana se cancelaron, mis profesores están enfermos.— Dijo la hermana de Soonyoung en medio de la comida.

—¿todos?— Preguntó su padre.

—No todos, pero cuatro lo están.— Dijo ella mientras se llenaba la boca de comida. —Tengo dos amigos enfermos también...¿ustedes no tienen a nadie enfermo en su aula?

—A una amiga.— Respondió Jihoon ya que Hoshi no podía hablar. —El equipo de voleibol también se enfermó y un par de maestros.

—¿Será un virus?— Preguntó la madre con una mirada preocupada. —Deberían cancelar las clases por seguridad.

—En las noticias no dijeron nada.— Dijo el padre casi sin interés. —Debe ser solo gripe, ya sabes, siempre hay temporadas donde todos se enferman. Tendrán que mejorar el sistema inmune.

—Tomarán vitaminas.— Sentenció la madre poniéndose de pie y buscando en los cajones, ella tenía centenares de vitaminas de todo tipo, y Jihoon sabía la razón, sus dos hijos eran un par de enfermizos.

—¿vitaminas?— Preguntaron Hoshi y su hermana con muecas incomodas. —Saben horribles.— Concluyó Hoshi. —Pensé que se habían ido todas cuando lanzamos la bolsa a...Cuando perdimos la bolsa de vitaminas...

La mujer hizo una mueca molesta y Jihoon cubrió sus labios para no burlarse en voz alta. La mirada de la mayor cayó en él.

—Tú también las tomarás, Jihoonie.— Ah...no debió moverse.

Parásito [SoonHoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora