ANTIDOTO🌈

EXPLICACIONES

Llegué al portal. Estaba cansada de que todo me saliera mal. Estaba cansada de estar así, estaba cansada de estar cansada.

Eran casi las siete de la mañana, mi madre estaría apunto de despertarse decididí llamar al timbre y que sea lo que dios quiera. Supongo que me inventaría una excusa como siempre hago...

llame y me abrió, al entrar por la puerta su cara de resignación pedía explicaciones. Parecía enfadada, me pregunto que porque no estaba en mi cama, que donde estaba y que en nada debería irme a clase. Le dije que había salido a dar una vuelta para hacer un poco de ejercicio, operación bikini ya sabes mamá, le respondí. Le dije que olvide llevarme las llaves, no se si realmente se lo llegó a creer, pero no me dijo nada más. Solo que me diera un agua y empezara a vestirme para el instituto.

Como iba a ir al instituto, no había dormido nada en toda la noche. Y mi cabeza no estaba en lo que estaba. Empecé a desvestirme para darme una ducha haber si el agua helada me hacía algo. Odio mirarme al espejo y ver mi cuerpo, lleno de marcas y cicatrices.

Siempre me digo que son marcas de guerra, una guerra contra mi misma. Y después de lo de hoy creo que es una que terminaré ganando. O quizá no, quien sabe... mis puños estaban morados y un poco ensangrentados, nada nuevo. Manos a los bolsillos y mangas estiradas. Las dos normas de siempre...

Desayune algo rápidamente, después de vestirme y me fui al instituto. No me gusta mi instituto, ya sabes "pueblo"...

No tengo amigos allí, bueno allí ni en ningún sitio. No me considero asocial aunque si una persona fría y distante, hace tiempo no era así. Pero los golpes y las personas te hacen cambiar. Siempre fui la amiga de todos, bueno eso creía yo, solo me utilizaban para hacerles favores, nunca me tomaron enserio.

Llegó un momento en que las burlas, las risas, y los insultos se volvieron rutina, de una forma continua. Sufrí mucho porque no entendía porque me hacían eso, yo siempre había dado todo por mis "amigos" pero abrí los ojos vi que realmente nunca lo fueron. Lo jodida fue entender que quizá me lo merecía, suponía que si ellos hacían eso era por mi culpa.

Y es ahí cuando empiezas a hacerte daño a ti mismo. Cuando sientes que todos te hacen daño, todos apuestan para ver como caes, y que más da que tú también lo hagas. solo es un poco más...