ANTIDOTO🌈

VIERNES

Llegó el viernes, la verdad nada interesante para mi. Todos los viernes deseaba desaparecer, como cada día. Sobre todo este viernes. Empezaban las vacaciones de Semana Santa. Y todos sabemos que significa eso...

Viernes mas fiesta, es igual a fiesta en casa de alguien del instituto. Y está claro que es una fiesta a la que yo no estaré invitada.

Los "raritos" nunca vamos a esas fiestas, solo son aptas para ciertos niveles en la sociedad. Así se creen ellos. Ni que estuviéramos en la prehistoria verdad? Pues a pesar de evolucionar en el tiempo todo sigue igual. O eres popular o estás muerto socialmente.

La mañana transcurrió algo tranquila, lo cual era bastante raro en aquel apestoso instituto. Nada bueno debería estar cociéndose para que nadie me hubiera humillado siendo ya casi hora de salir de clase.

Se habrían cansado de mi por fin? O habría llegado al punto de ser tan inviable que no podrían ni siquiera verme. Mi cabeza deseaba aquellas dos opciones con toda su alma. Pero no estaba preparada para asimilar lo que iba a suceder en aquel cambio de clase...

Estaba tranquilamente pensando en nada y a la vez en todo mirando por aquella ventana descolorida por el calor que el sol reflectaba en ella. Se acercó Carmen provocando en ello la atención de todos nuestros compañeros de clase.

-oye Tara (por primera vez en años me estaba hablando de una manera tan dulce que pude incluso mirarla a los ojos) hoy es la fiesta de primavera, la haremos en mi casa. Porque no te vienes y empezamos de cero, lo podremos pasar bien todos juntos. (Que estaba pasando no lograba entender ninguna de las palabras que salían de su boca)

-chicas que es eso? (Pronunciaron tímidamente los labios de Mia, haciendo que la atención se centrara en ella)

-es la fiesta del último día antes de las vacaciones de Semana Santa, todos los años celebramos en mi casa será genial. Obvio tú vendrás Mia!! (Carmen empezó a abrazar a su nueva amiga, Mia hizo un gesto de agobio a aquel abrazo, luego cruzamos miradas y sonreímos)

-bueno Tara acuérdate esta noche a las diez en mi casa, va a venir todo el mundo. Ponte mona (hizo una mueca un tanto rancia y se giró rumbo a su mesa)

Odio que me digan como debo de ser, como debo actuar y que personalidad tengo que aparentar. Si cree que voy a rebajarme a su nivel de ponerme un vestidito con diamantitos la lleva clara....

Espera un segundo, yo no tengo amigos porque me estaba intentando invitar a su fiesta? De verdad quería empezar de cero conmigo? Quizá no con ella, pero alomejor si podía lograr hacer algún que otro amigo. Solo debía hacer algo que no se me daba muy bien....

sonreír y abrirme a la gente, es algo que odiaba hacer en público. Y más todavía cuando el público eran unos mocosos de mi instituto.

Tara tienes que empezar por no pensar de esta forma así no lo conseguirás, venga anímate y ve a esa fiesta ... me decía a mi misma interiormente. Era precisamente en estos instantes en los que ángel y el demonio de mi hombro se echaban flechas en llamas mutuamente.

Pero después de un buen rato planteándomelo terminó ganando aquel angelito que durante mucho tiempo había permanecido en silencio, quedándose casi completamente mudo e invisible.

Pero así sería aquella noche tenía una fiesta, mi primera fiesta!!!