Best Friends [Jotakak]

IX: Feliz cumpleaños

ALERTA DE MUCHO TEXTO: Este capítulo es del doble de lo que escribo normalmente, así es, el DOBLE. Así que espero que no se aburran con un capítulo tan largo.

También quiero decir que sufrí escribiendo este capítulo porque no terminaba nunca, pero estoy bastante satisfecha con el resultado y espero que piensen lo mismo. ♥️

Y por último, les recomiendo colocar la canción que dejé arriba en cierto momento del capítulo. En el mismo capitulo se menciona donde colocar la canción.

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6 de agosto por la noche, 21:30 para ser exactos, con mamá ya habíamos cenado, yo me encuentro lavando los platos y ella preparando su maleta pues mañana por la mañana sería su vuelo. De la nada suena el timbre y me deja fuera de lugar, es raro que alguien llame a la puerta tan tarde.

—Noriaki, ¿Puedes abrir?

—¡Voy!

Me saco los guantes de látex y el delantal de cocina para abrir la puerta. Veo que es Jotaro junto a una maleta color negro, yo simplemente lo dejo entrar, pero cuando ya cierro la puerta principal me dedico a regañarlo.

—¿Ves la hora que es? Es súper tarde, hace frío y vienes saliendo de un resfriado. Te enfermarás de nuevo.

—Yo también me alegro de verte, sobre todo con ese atuendo. —Dijo de forma burlesca, refiriéndose a mi sudadera verde que llevo en la parte superior, los pantalones del pijama, calcetines peludos para el frío y crocs verdes. A eso se le suma mi cabello despeinado y con friz, dado que después de bañarme solo había tenido tiempo para secarlo, más no de peinarlo y ordenarlo.

—Llegas a mi casa, un día antes de lo que dijimos, de noche con frío, tú saliendo de un resfriado y encima te burlas de mí. —Desvío la mirada y me sonrojo un poco en antelación a lo que voy a decir. —Pero tienes razón, me alegro de verte.

—Tenía muchas ganas de venir, así que le pedí a mamá que me viniera a dejar antes en el auto. ¿No te molesta?

—Al menos viniste en auto, no iba a tolerar que te quedaras en la calle hasta tan tarde de nuevo. —Le doy la espalda y comienzo a caminar en dirección a la cocina. —Voy a terminar de lavar los platos. Puedes dejar tus cosas en mi habitación ¡Y no te olvides de saludar a mi mami! ¡Y avísame si tienes hambre, te prepararé algo de comer!

Vuelvo a colocarme el delantal con los guantes de látex y continúo lavando los platos, logro escuchar los pasos de Jotaro yendo hacia mi habitación y luego otros que se acercan a la cocina. Mamá me habla asomada desde el marco de la puerta.

—Nori, después de que laves los platos necesito que vayas a mi habitación, hay algo que quiero hablar contigo.

Tengo miedo.

Después de terminada mi tarea, voy temeroso hasta la habitación de mi madre, con el presentimiento de que algo malo va a pasar. Ella se encuentra sentada en la cama y yo me siento a su lado, espero a que ella comience a hablar.

—Yo sé que van a pasar muchos días juntos y solos, eso les deja las puertas abiertas a muchas cosas. Pero yo te conozco y sé que eres un buen chico, solo que estos días no caigan en los excesos.

Ah claro, es “la charla”, eso quería decirme.

—Les compré 24 cervezas, con eso debería ser suficiente para la semana que se van a quedar juntos, no se las beban todas en una sola noche, háganlo de a poco. También sé que Jotaro fuma, y que tu padre y yo no somos los mejores ejemplos respecto a eso, pero en lo posible no pruebes el cigarro, te va a hacer mal. Con las drogas tampoco, nada de drogas, eso sí que no está permitido.