La fiesta de graduación fue todo un éxito. Todo había salido mejor de lo que imaginé.
Chris me había obsequiado un CD donde tenía grabado el momento en que expuse mi discurso ante cientos de personas, y esperaba conservarlo toda mi vida.
Gran parte de la noche fue estupenda, bailé por horas con muchos de mis conocidos, familia y amigos.
Solo me faltó una persona que nunca dio señales de vida.
Uno de mis profesores me había ofrecido trabajar con él. Era una gran oportunidad para comenzar oficialmente con mi vida laboral, pues el profesor Norman (ese es su nombre) era un gran empresario y solo daba clases en su tiempo libre por decirlo de algún modo.
Pero tuve que rechazar su oferta por no dejar a Calum, ya que si aceptaba, debía quedarme en casa y no volver a Sídney en mucho tiempo, sino es que para siempre.
Por lo que me vi en la necesidad de mentirle a él y a mamá diciéndoles que ya tenía empleo y no podía fallarles a mis superiores, y debía regresar lo antes posible.
No niego que deseaba quedarme más tiempo en casa, pero mi necesidad de saber qué había pasado con Calum, era mayor.
Así que ahora estaba en un avión de vuelta a Australia y apunto de aterrizar.
Agradecía haber encontrado un vuelo para el día siguiente a la fiesta.
Di un fuerte suspiro antes de bajar del avión y cuando tuve mis maletas en mano subí a un taxi, cómo la primera vez que me llevó a casa.
Calum ni siquiera se había tomado la molestia de llamar una sola vez, al menos para recogerme en el aeropuerto.
Por esa razón no sabía si quería verlo en los días siguientes.Llegué a casa dejando las maletas en el pequeño jardín para sacar las llaves de mi bolso. Se me dificultó hacerlo por la poca luz que me iluminaba.
Y al abrir la puerta me lleve una gran sorpresa por lo que mis ojos contemplaron.—¿Calum?— Casi grité tirando el equipaje al suelo.
No se dio cuenta que alguien entró a la casa hasta que hablé.
Él se sobresaltó apagando de inmediato el cigarrillo que hacía pocos segundos había sacado de sus labios.
Mi casa estaba hecha un asco, olía a hierba por cada rincón. Y había colillas de cualquier tipo de cigarrillo tiradas por todos lados, al igual que botellas de cerveza y cualquier tipo de bebidas alcohólicas que uno se pueda imaginar.
—¡¿Qué mierda te pasa Calum?!— Grité más fuerte azotando la puerta de la casa, al mismo instante que lágrimas comenzaban a caer por mis mejillas.
—Nena yo...— Habló por primera vez cuando se puso de pie.
—No quiero que me digas nada— Sollocé —¿Fue por esto Calum? ¿Por estás mierdas me dejaste sola?— Tomé la hierba de una pequeña bolsa y de inmediato la tiré de nuevo a la mesa de centro. Donde yacía una fotografía mía enmarcada —Porque por si no lo sabías te estuve esperando cómo una idiota y tú nunca te apareciste. Ni siquiera tuviste los suficientes pantalones para llamar y decirme que no irías—
Él sólo escuchaba en silencio mientras miraba al suelo. Y ahí fue donde noté que su rostro estaba hinchado y parecía que no había dejado de llorar por días enteros.
Tenía unas enormes ojeras y no sabía cómo era posible que en pocos días había adelgazado tanto.
—Nena— Comenzó a llorar, de nuevo, supongo. Se tiró a abrazarme y no paraba de llorar —Soy una mierda nena. Soy una maldita mierda que no te merece — Decía mientras escondía su rostro en mi cabello.
Nunca vi a Calum de esta forma y tampoco creía que algún día tuviera esta actitud.
Él era demasiado fuerte, siempre decía ocurrencias, hacía bromas y sonreía a cada instante, que no podía verlo así de frágil, vulnerable, débil y roto.
Dejé de lado el hecho que me había plantado y lo abracé, lo abracé cómo si no hubiera un mañana y comencé a llorar con él.
—Por favor. No te alejes de mí— Susurró —Eres todo lo que tengo, no puedo perderte. Te amo cómo un imbecil nena. No me dejes nunca. Sé que soy una mierda y no te merezco, porque tú eres preciosa y perfecta. Te necesito a mi lado por siempre—
—Cal, no digas eso— Me separé de él limpiando mis lágrimas —Eres una persona espectacular. Yo te amo cómo nunca nadie te amó. No podría al menos tener en mente la idea de alejarme de ti, porque tú eres mi vida entera— Limpié su rostro y no pude resistirme a besarlo.
Él siguió de inmediato el beso recostadome en el sillón y sabía que quería llegar más allá de los besos. Por su forma de besar y su desesperación que lo caracterizaba en estos momentos.
—Cal— Lo detuve cuando quiso quitar mi blusa —No ahora amor. Estoy muy cansada, el vuelo fue largo, lo sabes— Él asintió intentando hacer una sonrisa y se apartó de mí —Dime una cosa— Tomé su mentón para que me mirara. Y antes de volver a hablar tragué saliva —¿Fue por esto que no llegaste?— Pregunté guiando mi mirada hasta los cigarrillos.
Tardó unos segundos en responder y finalmente susurró un simple “Sí”.
—De acuerdo— Suspiré —Voy a olvidar lo que sucedió, no se volverá a tocar el tema si tú dejas de fumar estas porquerías amor.
No sólo por lo que pasó, sino porque también te está haciendo mucho daño. Será la última vez y no volverá a pasar—
—No volverá a pasar linda— Aseguró.
—Bien— Sonreí —Ahora, es mejor que subamos a dormir ¿Sí?—
—Lo que tú digas preciosa—
Besé sus labios, lo tomé de la mano y ambos subimos a la habitación.
—Perdóname nena— Dijo cuando ambos estábamos ya recostados en la cama —Perdóname por ser un idiota y haberte dejado en un día tan importante para ti, sé que te lo prometí y no lo cumplí. No sabes lo mal que me siento, porque no mereces lo que te hice—
—Cal, ya no hablemos de eso—
No quería tener que recordar todo lo que pasó por mi cabeza estos últimos días y cómo me sentí por estar esperando, y decepcionarme cuando era ya muy tarde y él no llegó.
Solo quería olvidarlo, y pensar que fue por un momento de debilidad que tuvo Calum. Momentos que todos tenemos de vez en cuando, por lo que no puedo culparlo del todo, ya que sé con exactitud cómo se siente.
Además, recuerdo que alguna vez Ashton mencionó que hace años Calum solía deprimirse por cosas insignificantes y que su vida no siempre fue una maravilla.
—No lo haré si no quieres nena. Solo quiero que me perdones y me prometas que pase lo que pase no te vas a alejar de mí—
—No lo voy a hacer cariño, te lo prometo— Besé sus labios por última vez en el día y cerré mis ojos —Ahora duerme—
______________________________________________________________________________________________________
Decidí omitir partes no tan importantes para adelantar la historia. Por lo que les aconsejo no perderse el próximo capítulo.
Y cuando actualice, antes de leer pongan High y traigan las galletas para cortarse las venas :(No olviden que los amo💖, voten ❤️ comenten ❤️ y cuídense amores ✨.
![](https://img.wattpad.com/cover/235825035-288-k742468.jpg)
ESTÁS LEYENDO
High-Calum Hood
Fanfiction"Espero que pienses en mí cuando estés con alguien más." Calum Hood - Fanfic Todos los derechos reservados. Queda prohibida la copia y/o adaptación de esta historia.