Beso y tonterías (9)

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Salieron al exterior, donde había un hermoso patio decorado con una fuente central, una barandilla de tamaño medio, hasta la cintura o similar de mármol y la luz de la luna y las luciérnagas, junto con las luces del interior eran los únicos puntos de luz que había en aquel patio en el que se resumía todo en intimidad para las conversaciones de negocios o para las parejas.

- ¿No está interesada en el matrimonio usted tampoco? ¿Verdad?- musitó caminando al lado de la fuente y mirar el agua cristalina que brillaba por la luna.

- B-Bueno... Si me permite ser sincera, la verdad es que no tengo ningún interés en casarme.

- ¿Estás comprometida entonces?

- Se anuló el casamiento, la familia invitada me rechazó por el carácter de mi padre...

- Ya veo... ¿Cuál es su apellido, querida?

- A-Ah... Y-Yo...- apartó la mirada y tragó saliva- Yo... ah... A-Alexandra...- su mente intentó crear un apellido rápido para poder mentirle, pero para tampoco podía ser un apellido descabellado, porque bien podría notarse que era una mentira, o un apellido demasiado común, porque podría coincidir con algún otro reino...- A-Alexandra L-Line- casi dijo sin pensar mucho en la complejidad del apellido que se habían puesto como excusa y después palideció, pero no se vio, pues estaba de espaldas a la luz y su cara no era vista, también porque se alejaban de la luz, hacia la barandilla de mármol blanco.

- ¿El reino Line? Lo lamento querida... No lo conozco... ¿Dónde se encuentra?

- E-Es un r-reino pequeño... No es muy conocido... E-es un pueblo cercano al famoso río de gran caudal y con torrentes de agua incontrolables...- Christian asistió con la cabeza ante aquella falsa explicación, pobre, recorrería el río entero solo para buscar su palacio... un falso castillo que no existía.

- Me encantaría conocer tu palacio, aunque si rechazaron tu casamiento por el carácter de tu padre, no sabría decir si sería muy bienvenido allí.

- He de confesar que he venido aquí sin que mis padres lo supieran.

- Oh... ¿Eres hija única?

- E-eh... p-pues... Verás... Y-yo...

- ¡Alexandra!

Álex se tensó y se puso firme, después buscó alrededor, rápidamente fue reprendida por su hermano pequeño por el avambrazo que casi se la llevó arrastrando al interior de la fiesta alejándola del príncipe castaño oscuro.

- ¡Princesa...!- llamó el castaño bastante sorprendido por aquel acto de agresividad- ¿¡Podré volver a verla!?- insistió aunque sabía que ella ya estaba muy lejos para oírlo o para contestarle.

- ¿Keenan, que diablos te pasa?

- Nos largamos de aquí, ya.- ella se quedó en blanco y bastante sorprendida por aquella respuesta tan agresiva que había dicho, ni siquiera se había dado cuenta de que los miraron mal por su forma de hablar tan informal y furiosa.

- ¿Qué ha pasado?

- Nada.- y después de avisar al cochero le entregó la mano para entrar en la carroza sin darle oportunidad a negarse, después pasó él y cerró la puerta con tanta fuerza que sacudió el interior entero.

- ¿Keenan, qué ha pasado?

- El príncipe Ryan está enfermo.- abrió los ojos sorprendida por lo que dijo y la forma en la que lo dijo.

- ¿Qué? ¿Perdón? ¿Enfermo en qué sentido? ¿Qué te ha hecho?

- Ese maldito pensó que era una estúpida mujer o algo, porque me sujetó de la cintura. Por dios, eso es realmente asqueroso, ¿Cómo puedes aguantar que te sujeten así y no sentirse inferior?

12.- Princess (Trans/LGBT+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora