Strong | Jasper Hale.

Capítulo 15

Mientras Jasper casi se lleva mi alma completa al corresponderme y darme un bello beso en la mejilla, Dan y Alice se volvieron novios... Si, novios.

Cuando salí con Jasper ellos se fueron a otro lugar también apartado y decorado. Hablaron, confesaron sus más que mutuos sentimientos, Alice le dijo algo así cómo que le cuesta un poco no "comérselo" por un asunto todo raro que tienen los vampiros y Dan con su tono burlón y seductor le dijo lo mismo; ellos terminaron besándose.

Quedé impactada.

Pero supongo que cuando alguien es para tí, es para tí. Todo pasa rápido porque se han estado esperando toda la vida, sobre todo Alice.

Ella misma le contó que lo vió en una visión hace diez años. Cuando Dan tenía siete. Suena raro pero bueno.

También dice que es su compañero y el amor de su vida y- Me dieron ganitas de llorar.

¿Saben quién vino a desayunar? La mismísima Alice Cullen.

—Linda, mi esposo lamenta no poder estar aquí. Tuvo que ir al trabajo, pero ambos te damos la bienvenida a la familia Taylor.— le dice mamá alegremente a la vampira frente a ella.

—No se preocupe, Hannah... ¡Y gracias!— le responde tan encantadora como siempre.

—Bueno, Alice, te advierto que Dan puede llegar a ser muy cariñoso aunque tú eres así también... Pero él a veces es muy miedoso y débil. Tendrás que protegerlo.

Si Dan se puede reír de mí, yo también de él.

—¡Dana! No digas eso de tu hermano— me regaña. —No le hagas caso Alice.

—¡Si! No te gustaría que yo dijera todas tus verdades frente a Jasper— aporta.

—¿Como cuáles?— reto.

—Que comes como un hombre obeso— acusa.

—Pues tú nunca tuviste novia porque eres muy selectivo— ataco.

—Igual que tú— contraataca. —Además, ya tengo, Danidie. Te gané, envidiosa.

Abro y cierro la boca como un pez fuera del agua; buscando algo con qué defenderme.

—¡No me digas así!

—¡Hey!— exclama pero se recompone rápidamente. —Vaya primer día que le dan a Alice.

Nos hace esa mirada extraña que tienen las madres para implantar miedo.

No sé en qué momento me levanté de la silla. Me siento nuevamente.

—Perdón— murmuro.

Alice se divirtió mucho con nuestra pequeña escena.

—¿Saben qué? Ustedes salgan por ahí. Dan, lleva a Alice a un lugar bonito, aprovechen su juventud y amor. Dana, busca a alguien con quién estar; tengo que irme a trabajar.

¿¡En sábado!? ¿Trabajo un sábado?

El crimen y los enfermos no perdonan a nadie.

La feliz pareja no espera mucho para irse a no sé dónde, mamá se pone su uniforme de del hospital y se va. Yo me quedo sóla.

La vida de soltera.

Pero no me voy a poner a llorar. Busco mucha comida y me lanzo al sofá para ver cualquier cosa en la televisión.

Cómo me aburro gracias a la falta de programas, llamo a Bella.

—¡Hola! ¿Cómo estás? ¿Qué haces? ¿Te gustaría venir a mi casa?