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El olor a gasolina y el humo, el fuerte dolor de cabeza y la voz débil de aquel hombre le hacían saber que aun seguía con vida, su mente daba vueltas, no veía con claridad. Sentía algo húmedo recorrer su cabeza y cuerpo, colgaba de cabeza y el cinturón de seguridad la apretaba con fuerza lastimándole el pecho. Podía escuchar a aquel hombre maldecir, la respiración de la castaña era lenta y dificultosa, le dolía el cuerpo entero. Recorrió el lugar con la mirada, todo estaba oscuro, la penumbra recorría todo el lugar, se extendía por el bosque , escucho voces lejanas. Apenas susurros, tal vez ya estaría muerta y las voces provenían del otro lado ¿Iría al cielo o al infierno? No le importaba, en lo único que pensaba era en su novio.

- J-Jacob... - dij0 con sus ultimas fuerzas antes de cerrar los ojos.



Despertó tirada en la sala de una cabaña aun con la topa ensangrentada, el fuego crepitaba alegremente en la chimenea. Miro todo el lugar ¿Dónde estaba y como había llegado ahí? Se puso de pie torpemente al escuchar  risillas procedentes de uno de los cuartos del pasillo, camino hasta entrar a un cuarto. Miro a su novio encima de una chica, besándola juguetonamente. Camino sin decir nada y con el corazón encogido hasta quedar aun lado de ellos, el y ella no la veían, cuando Jake se aparto TN quedo estupefacta. La chica que estaba abajo de el era...

Era ella.

La puerta se abrió de golpe, algo la arrastro con fuerza y la atravesó, callo  de espaldas sobre el suelo duro y cubierto de pasto, el golpe le saco el aire, se sentó en el suelo intentando respirar, miro a su al rededor. Estaba fuera de la casa de Emily y Sam. Miro con atención, de nuevo nadie la veía. Jacob salió de la casa persiguiendo a una niña pequeña que no paraba de reír. Tenia el pelo y los ojos oscuros de Jacob, se parecía tanto a el, menos por la piel clara.

- Ya te tengo cachorrilla - rio el moreno, la sostuvo y la aventó al aire para después atraparla en brazos.

- Ya niños - escucho la voz de Leah y se giro hacia la casa, ella estaba recargada en la puerta y los miraba con una sonrisa ladina, Emily apareció a su lado son teniendo a un niño de la que parecía ser la edad de aquella niña.

Y otra vez se vio  a si misma, traía puesto un vestido azul claro que le llegaba a las rodillas, era bastante grande. Y aun así se notaba su avanzado embarazo.

Volvió a ser arrastrada y esta vez choco contra una pared golpeándose el rostro, se miro en la mesa, con gesto preocupado.  Arrugando una hoja.

El suelo se abrió y cayo por un estrecho agujero, aunque esta vez cayo con suavidad sobre el suelo, miro a toda la manada reunida, a ella y a Jake tomados de las manos. Casándose.


Despertó en una habitación oscura, la rodeaban vidríales, no había ninguna ventana ni puerta, estaba encerrada, intento romperlas pero no pudo.

- Te extraño Bonita... - escucho la voz de Jacob, hermosa, suave, lejana.

- ¡Jake! - grito - ¡Jake, Jake!

Los susurros se acumulaban en su cabeza, se tironeo el pelo con desesperación y comenzó a gritar, pataleo con fuerza el cristal hasta que lo logro romper, todo se desplomo tarándola al vacío, en la oscuridad. Que estaba dispuesta a tragársela.



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¿Que? ¿Me extrañaron?

Lo siento por tardar, pero no tenia muchos ánimos de hacer nada. Lo siento

The LightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora