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Las horas gratamente transcurrieron amenas, Hye se esforzaba constantemente en sacarme una sonrisa, yo solo pedía porque no le cacharan y reprendieran. Afortunadamente, sobrevivió.

Luego de salir San se ofreció a acompañarme de camino a casa, me platicaba sobre el loco experimento que practicaron en el laboratorio él y sus compañeros. Terminó en alerta roja y desalojo del lugar, increíble verdaderamente.

— ¿Tanto así? — San asintió.

— La sustancia azul dentro del vaso y BOOM, lo siguiente fue la profesora pidiéndonos con preocupación que saliéramos a lavarnos rápidamente.

— Wow, son realmente peligrosos ustedes.

— Fue Jung, en lo que me percataba él ya estaba echando la sustancia al vaso, no pude evitarlo a tiempo.

— ¿Ocupado en..— levanté mis cejas una y otra vez divertida.

— Minju— afirmó a mi suposición por lo bajo.

— Correcto, lo sabía— reí brevemente. Este formó un tierno puchero en sus labios— ¿Hablaste con ella?

— Luego de toda la ruidosa situación, cuando salí de los vestidores me topé con ella.

— Ajá..— formulé incitándole a que continuase.

— Charlamos un poco.

— Sí..

— La invité a salir.

— Y..

— Me respondió— sonrió divertido, luego de su mal chiste golpeé en su brazo ligeramente.

— Yah, muy chistoso— le fulminé con la mirada por unos segundos.

— Dijo que sí— soltó de repente con emoción, mi boca se abrió considerablemente.

— ¿Dijo que sí? ¿sí de sí? ¿sí?

— Sí, sí de sí Kim— regresó sonriente. Una gran sonrisa se impregnó en mis labios al instante, y lo siguiente fui yo gritando.

— ¡Es genial!— sacudí su brazo derecho.

— De hecho no podía creerlo, sigo sin creerlo, de camino para encontrarlas aún seguía como en estado de trance— confesó, haciéndome sonreír enternecida.

— Mi niño está creciendo, ayuda— dije mientras fingía limpiar una lágrima inexistente. Él negó mientras me miraba risueño.

— Que me lleves cuatro meses no te hace súper mayor Nabi~ah, recuérdalo.

— Ah claro claro, lo que diga el niño grande— ambos reímos luego de ello.

— Te veo mañana entonces— pronunció luego de detenernos frente a mi casa. Asentí repetidas veces— Descansa.

— Igual, gracias por tu compañía— devolví en despedida. Este sonrió mientras agitaba su mano, imité su gesto y me adentré a casa luego de verle emprender camino.

— Woah~ oppa, repítelo de nuevo, olvidé lo último que recitaste— la voz de Sunyoung resonó en mis oídos tras cerrar la puerta a mi paso— Es muy genial, debí haberlo intentado antes, no sabía que poseíamos tanto poder— a paso veloz me dirigí al comedor.

Luego de pararme bajo el umbral de la puerta confirmé mi suposición, aunque ahora que lo recordaba bien dijo que vendría a mi casa. Más no sabía que ese 'iré a tu casa', sería tan pronto.

|| WITCH || Choi ChanheeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora