Mauro POV.
Parpadeé y refregue mis ojos tratando de adaptarme a la luz que entraba por la ventana, no hubo caso y los volví a cerrar. Traté de ignorar las ganas de no despertarme y el frío que hacía, el cual podía sentir aunque estaba tapado.
Estiré mi brazo hacia el costado, tratando de adivinar donde estaba Noa para traerla hacia mi pero mis dedos solo tocaron las sabanas frías. Ya se había levantado.
Suspiré y me desperecé un poco.
-¿Te despertaste?- pude escucharla arrastrar sus pies hasta que sentí el colchón hundirse a mi lado -Sí, te despertaste- respondió a su pregunta.
Sentí como apoyaba parte de su peso sobre mi. Sus dedos peinaron mi flequillo y despejaron un poco mi frente.
-Te traje el desayuno de un día antes de cumpleaños- dijo después de besar mi mandíbula.
Sonreí un poco. Solo a ella se le ocurría algo así.
-Mirame- exigió.
Como si ella tuviera alguna clase de poder sobre mi abrí los ojos para mirarla. Estaba sonriendome.
Su pelo caía un poco despeinado y su cara seguía un poco hinchada por el sueño. Todavía seguía en pijama.
-Hola- susurró y se escondió en mi cuello.
Saqué uno de mis brazos de abajo del acolchado y golpeé su culo después de haber acariciado su espalda unos segundos.
-¿Querés que te deje ir al baño antes de desayunar por lo menos?- preguntó todavía escondida, su respiración chocando contra mi piel me hizo dar calosfrios.
Cuando se quiso mover apreté su culo e hice un sonido con la garganta para que se quede un poco más donde estaba.
Esperó en el lugar a que esté preparado para levantarme y cuando me puse de pie ella también se levantó para acomodar un poco la cama.
-Desayuno en la cama- la vi señalar la bandeja arriba de la cama cuando salí del baño.
Me senté a un lado de ella y miré todo lo que había preparado.
-¿A qué hora te despertaste?- pregunté curioso mientras la veía tirar un saquito de té dentro de una taza.
-Ufff, hace como dos horas- agarró otra taza y la extendió en mi dirección -Te hice café con leche, le hice espumita y le puse un poquito de chocolate con canela- guiño en mi dirección y quise tirarme arriba de ella.
Parecía estar más emocionada que yo con cumplir años.
-¿Queres empezar comiendo medialunas con jamón y queso o tenés tostaditas o budín de limón?- no había respirado ni un segundo mientras hablaba.
-Quiero un beso tuyo- sugerí.
Noa se quedó en silencio y me miró entre chistosa y vergonzosa pero de todas formas se acercó a mis labios y los besó suavemente. Pasé mis dedos por su cuello y los dejé en su nuca para que no se alejara.
-Te besaria más pero tengo hambre- susurró contra mi boca antes darme un último beso y alejarse.
Después de un rato seguíamos sentados en la cama, la música sonaba baja en el lugar y no había un tema de conversación central entre nosotros, íbamos y veníamos de diferentes tópicos.
Observé a Noa y acaricie su pelo suelto mientras terminaba mi último sorbo de café y apoyaba la taza en la mesa de luz para recostarme contra la pared.
No podía ni siquiera pensar el progreso que habíamos tenido como pareja y la satisfacción que me generaba cada vez que me recordaba que ella estaba a mi lado.
![](https://img.wattpad.com/cover/137689066-288-k975527.jpg)
ESTÁS LEYENDO
RED EYES 2 / Mauro Lombardo, Duki.
Teen FictionBusca la primer parte para poder leer la segunda.