Chapitre 5

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Sherman cargó las últimas maletas al coche de los Peterson. Penny sabía que su mirada estaba vacía, ¿pero qué le podía decir? 


Los padres de Penny hablaban animadamente con el señor Peabody. Sherman les había agarrado cierto cariño, eran como familia.


Sherman y su padre fueron a despedirse de los Peterson al aeropuerto. En el camino, Sherman le contó todo a su padre:


-Me siento orgulloso de ti, Sherman. -dijo el señor Peabody con una sonrisa -Estoy seguro que si me fuera también estarías preparado para eso al igual que con la ida de...


Sherman paró el auto en seco y se puso a chillar como cuando se cayó de la bicicleta a los 6 años.


-¡No quiero que nadie más se vaya! -gritó llorando y apretando con fuerza el volante -¡NO QUIERO! ¡NO QUIERO! ¡NO QUIEROOOO!


-Olvídalo.


-¡ES INJUSSTOOOO! -siguió lloriqueando -¿por qué? ¿por qué? -balbuceó.


-Sherman, verde. -le advirtió su padre. Sherman se limpió las lágrimas rápido y se apuró a llegar al aeropuerto.


Llegaron con retraso, Penny estaba a punto de abordar el avión con sus padres. Sherman le sonrió y Penny le regresó la sonrisa.


"Sherman..." pensó Penny, "sé que haz visto muchas películas de amor, te he obligado a eso. Por favor..." rogó. "Sé que me amas... antes de que me vaya di algo."


Él se quedó callado, sufría en silencio, no sabía si decirle algo antes de que se fuera, y estaba 100% seguro que ella quería que él le dijera algo.


Pero no lo hizo. El silencio otorga.


No dijo nada, no porque no sintiera nada o porque no sabía qué decirle. No dijo nada porque estaba seguro que, si le prometía algo o le juraba un amor eterno, no duraría por la distancia.


Nada duraba cuando se trataba de ellos, nada dura para un amor que no lo entrega todo. Sherman permitió que Penny se fuera sin más porque él no estaba dispuesto a entregarle los pocos pedazos de amor que aún conservaba de todas las veces que se ilusionó con Penny y no lo logró.


Si le entregaba todo ahora, en ese instante, no sobreviviría. Su vida dependería más que nunca de Penny.


Penny le dio una última oportunidad y volteó. Y lo único que recibió de Sherman fue un frío y doloroso "adiós".


Un "adiós" que significaba que la dejaría vivir su vida, que la dejaría ir, que de ahora en adelante estaba totalmente sola. No más Sherman. No más nada.


Penny indignada se fue, daba las gracias de que se iba y no volteó atrás. Pudo haber hecho lo que hacían en las películas de amor, la típica escena de que ella desperdiciaba el boleto y el viaje por quedarse con el chico que le rogó que se quedara.

Sherman et PennyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora