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Apagué mi celular y lo dejé sobre la isla de la cocina, agrediendo verbalmente a mi amigo en mi cabeza

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Apagué mi celular y lo dejé sobre la isla de la cocina, agrediendo verbalmente a mi amigo en mi cabeza. Me incliné un poco para verificar el estado de mi increíble almuerzo en el horno, revisando a la par el reloj en mi muñeca, notando que faltaban menos de diez minutos para sacar mi grandiosa creación de allí finalmente, y poder comer.

Fui a la habitación de Mike con la intención de llamarlo a comer. Era viernes, su último día de la semana donde debía meterse a las tediosas clases, y ahora estaba en literatura, su clase favorita, o más bien, con su maestro favorito y el encargado de su clase. Me quedé detrás de la puerta, escuchando curioso, sabiendo que ahora John les daría aquellos minutos para comer.

—Maestro John, algún día lo invitaré a comer con nosotros. —habló mi hermano, ¿por qué planeaba cosas sin preguntarme?

¿Ah sí? ¿Por qué debería ir? —preguntó él, siguiéndole la corriente.

—Porque Paul cocina delicioso. Mire, le enseñaré lo que está haciendo ahora.

Tragué saliva y me alejé rápidamente de ahí al oír tanto ruido, corriendo de regreso a la cocina y poniéndome bastante nervioso. Observé todo a mi alrededor, dándome cuenta de que estaba perfectamente ordenado y limpio, sólo habían un par de platos y cubiertos en la mesa, y mis guantes de cocina para sacar la bandeja cuando la comida estuviera lista. Vi a Mike aparecer por el pasillo hasta llegar junto a mí, cargando su laptop en sus manos con una enorme sonrisa en el rostro, yo me hice el tonto y lo miré fingiendo confusión centrando mi atención en la pantalla, viendo que tenía la cámara encendida.

—¿Por qué trajiste eso? —pregunté, Michael alzó los hombros.

—Paul, ¿ya está listo? Quiero enseñarle a mi maestro lo que haces.

—¿Tus compañeros están ahí? —quise saber, viendo la pantalla.

Nop, los chicos se fueron a comer, sólo estamos los tres. —contestó John en su lugar.

don't touch me ; mclennonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora