XXI • UN ACOSADOR

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Escucho a mi madre mantener una acalorada discusión con nuestra agente de bienes raíces, mi madre sigue tratando de acelerar la venta de la granja y sé en el fondo que es lo mejor

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Escucho a mi madre mantener una acalorada discusión con nuestra agente de bienes raíces, mi madre sigue tratando de acelerar la venta de la granja y sé en el fondo que es lo mejor. Joshua que no estaba enterado de nada de lo que sucedió, se veía perdido, Fede le decía que no se preocupara, que no era de su incumbencia y que él debía seguir trabajando.

—Oye Andró —me llama el menor abriendo la puerta del refrigerador de la cocina, sacó un jarro con agua fría y se sirvió en un vaso que sacó de la alacena. Deje de trabajar en la computadora para verlo, Federico entró por la puerta quitándose el sombrero, se veía algo rojo por el esfuerzo y un sudor notorio le recorría desde la frente hasta el cuello.

—Dime Jos —aliento al chico a hablar, cuando noto que mi novio entró cerró la boca con incomodidad, de seguro iba a decir algo que tal vez Fede le dijo que no preguntara.

—En Santo paraíso tenemos un festival de bienvenida a la primavera, es algo familiar y aburrido. Por eso los jóvenes tenemos una fiesta clandestina escondida en los bosques, con Amelie iremos y queríamos invitarte a ir con Fede. Te aseguro que en estas fiestas nunca pasa nada, muy pocas personas la conocen y los adultos no interfieren por lo que es lugar idílico para tomar hasta perder la conciencia —argumenta el castaño con una sonrisa en el rostro, se veía muy emocionado por ir a esa magnífica fiesta que parece ser su tradición anual. Mire a Fede intercambiando con solo miradas lo que ambos sabíamos que sería mi respuesta.

—Jos es muy lindo de tu parte invitarnos, pero la verdad es que no quiero asistir a otra fiesta y Fede tampoco por lo que no iremos. Ustedes pueden ir con Amelie, diviértanse con cuidado y beban todo lo que hayan visto cómo se abrió delante de sus narices. Nada de tomar lo que te ofrezcan —le señaló con el dedo escuchándolo reírse, mi vaquero estiró su mano dándole un golpe tras la nuca al muchacho que captó la indirecta y se dejó de reír.

—Abriré mis propias bebidas.

—Mami y papi están orgullosos de ti —bromeó poniéndome en pie para acercarme a Fede que me rodea la cintura con el brazo —Pero no te libraras de nosotros tan fácil, podemos vernos en el festival aburrido al que asistirá todo el pueblo y luego ustedes se pueden ir a la fiesta clandestina. Sé que mi hermana estará en ese festival, aunque no sea del agrado de muchos, pertenezco a este pueblo y celebraré la llegada de la primavera con mi hermana.

—Nos veremos en el aburrido festival —dijo el menor volviendo a dejar la jarra con agua dentro del refrigerador, se fue dejándome sola con el vaquero.

—¿Estás segura de que quieres asistir? —interroga con un dejo de preocupación, sé que ir al festival implica ver al alcalde y a su nefasto hijo. —El pueblo puede llegar a ser demasiado hostil cuando se lo proponen y no quiero que te hagan sentir inferior. Eres mi sol, no dejaré que te dañen nunca —susurra acunando mi rostro entre sus manos, depositando un tierno beso en mi nariz y otro en mis labios.

—Quiero ir, me importa poco lo que puedan decir de mí y no dejaré que me hagan sentir menos vaquero. Hago esto por mi hermana, sé cuán importante será esto para ella y no quiero decepcionarla.

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⏰ Última actualización: Apr 25 ⏰

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