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El castaño fué al parque después de clases como lo había acordado con Lee. Estaba realmente ilucionado, una pena que haya olvidado de un momento a otro que aquél chico estaba saliendo con alguien más.

—¿Jisung? Hola.

— ¡Minho!— Dijo emocionado, pero de a poco su emoción se fué al ver la expresión de Lee. —¿Minho?

— ¿Sabés por qué te cité, no? Quiero que dejes en paz a Seungmin.

— ¿Qué?

— Yo estoy saliendo con él, se que gustas de mi y la verdad... no me gustas, me gusta tu primo.— Se quedó en silencio por un momento y continuó.— Llegas a tratar a Seungmin mal y te las vas agarrar conmigo ¿Quedó claro?— Luego de aquellas dolientes palabras se fué.

Hyunjin observó todo detrás de un árbol que se encontraba a pocos centímetros de dónde se encontraban aquellos dos. Después de escuchar las palabras del pelinegro un sentimiento de rabia se instaló en su sistema, más al ver al pequeño con los ojos vidriosos.
Decidió acercarse a Han, algo despacio para no asustarlo.

— Jisung.— Lo llamó, pero no obtuvo respuesta. — Jisung, tranquilo.

— Estoy tranquilo, solo que me siento un tonto.— Dijo con la voz entrecortada para luego soltar un fuerte sollozo.

El más alto, al ver la situación en la que se encontraba su compañero, decidió abrazarlo y dejar que llore en su hombro por segunda vez en el día.
Jisung aceptó la acción del mayor, apretaba con fuerza el uniforme del contrario mientras se descargaba.

— De verdad confíe en él, y ahora manda a la persona que más adoro en éste mundo para hacerme sentir mal.

— No pienses eso, Minho vino por su cuenta. Además deberías saber que él no es el mejor manejando las cosas ¿si?— Respondió acariciando su espalda. — ¿Te acompaño a casa?

Luego de aceptar, ambos chicos se encontraban caminando en un silencio incómodo. De a ratos, Jisung volvía a llorar, haciendo que Hyunjin parara el paso para poder abrazarlo nuevamente.

— Mañana es sábado ¿Te apetece salir a recorrer algún lugar? Digo, para que no pienses tanto y te destraigas.

— Está bien, me parece buena idea... Gracias por estar conmigo hoy, en serio.

— No es nada, realmente no me gusta ver a la gente así de mal.

Siguieron hablando, el humor del castaño ya estaba un poco mejor para cuando estaban en la puerta de la casa. Ambos se despidieron con un movimiento de manos y tomaron distintos caminos.
Han apenas entró a la casa, decidió ir a su habitación y acostarse un rato. Después de unos minutos su celular vibró avisando que tenía un nuevo mensaje.

" Hola Ji, soy Hyunjin." Al ver el mensaje, una sonrisa apareció en su rostro.

"Hola ¿Cómo tienes mi número?" Respondió. La respuesta era obvia, pero no quería sonar seco con solo una palabra.

" Estamos en el grupo del colegio, así que de ahí lo saqué. Recuerda que mañana tenemos una salida, estoy en tu puerta a eso de las 12:30 así comemos algo afuera. Dulces sueños y no llores más."

Suspiró al ver aquél mensaje. Nunca había hablado mucho con Hwang, así que la situación se le hacía extraña. No lo conocía muy bien, pero algo en su interior le daba confianza en empezar una amistad con ese chico.
De repente su mente le hizo una mala jugada, recordó la foto de su amado con Seungmin. Intentó sacarla de su cabeza pero nada resultaba, rompió en llanto y luego de eternos minutos quedó dormido.

 Intentó sacarla de su cabeza pero nada resultaba, rompió en llanto y luego de eternos minutos quedó dormido

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A la mañana siguiente se despertó de mal humor, obviamente era porque todavía la foto rondaba por su mente.
Sus padres estaban en viajes de negocios, así que no tuvo que responder preguntas incómodas. Decidió hacer su rutina de todos los días, desayunó y se bañó como siempre.
Unas horas más tarde sonó el timbre, vaya sorpresa encontrar a Hyunjin en su puerta vestido como si fuera a una pasarela.

— ¿Qué hacés aquí?

— Hola, buenos días a ti también.— Respondió con sarcasmo.— ¿Te olvidaste de que íbamos a salir hoy?

— Oh... lo siento.— Dijo apenado.

El rubio notó que Han tenía los ojos rojos y su rostro sonrojado, estuvo llorando por la noche. Era obvio que iba a llorar, las cosas no se superan de un día para otro.
Esperó al menor en la sala ya que tenía que cambiarse para su salida, de igual manera Jisung bajó al instante. Estaba vestido como de costumbre, ropa holgada con sus típicos zapatos con algo de plataforma.

— Perdón por no preguntarte antes, pero ¿Quieres agua?

— No, gracias ¿Vamos?

El más bajito asintió con su cabeza. Antes de salir agarró su billetera, su teléfono y sus llaves. Al primer lugar que fueron era un arcade, lo disfrutaron muchísimo, pudieron hablar de muchas cosas y compartir sus gustos.

— ¡Bailas hermoso!— Dijo el pequeño con emoción después de ver una pequeña demostración del alto.

— ¿En serio? Muchas gracias, Ji.

Luego fueron a comer a un pequeño local en donde vendían pizza, pidieron una pequeña de muzzarella. Jisung quiso pagar su parte, pero el rubio no lo dejó.
Ahora estaban caminando por el centro comercial, Hyunjin estaba viendo ropa, demasiado cara para el bolsillo del menor.

— ¿Podemos entrar aquí? Quiero ver algo.

— Umh, claro.

Apenas entraron, el alto empezó a ver unas camisas de color negro, y le preguntaba al pequeño si le gustaba algo de aquél sitio. Minutos después, agarró una camisa negra de mangas cortas.

— Toma, ve a probarte ésto.— Ordenó con una sonrisa.

— ¿Por qué?

— Desde que te ví supe que deberías usar éste tipo de camisas, se te verían muy bien.— Respondió guiando a Han para después meterlo en un vestidor.— Pruébatelo.

Con desgano, decidió probarse la prenda. Cuando terminó de ponérsela agradeció mentalmente al chico por tener tan buen ojo, se le veía de maravilla.

— ¿Ya la tienes puesta? Dejame ver.— Dicho ésto corrió la cortina.— Wow, mi sentido de la moda es realmente bueno.

— La verdad es que si, nunca me había puesto algo así.— Estaba muy emocionado, pero luego vió el precio de la camisa.— Lástima que está muy caro y no tengo el dinero suficiente aquí, y-

— Ya la pagué.— "¿Qué?" se preguntó el pequeño en su mente.

— Oh... no debías hacerlo, de verdad yo-

— Tómalo como un regalo de un nuevo amigo.— Interrumpió con una sonrisa.

— Em... ¿Gracias?

Hyunjin sonrió ante la reacción de Jisung, se le hacía muy tierno verlo así de sorprendido. Era como un niño esperando un regalo de navidad, sus ojos brillaban en demasía y sus labios firmaban una enorme sonrisa. Una sonrisa que aquél rubio pudo decir que era la más hermosa que había visto.

DISTRACTION || HYUNSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora