Capítulo 3

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— Lo siento, de verdad, pero... —Digo apresuradamente echando una ojeada a mi reloj—. ¡Tengo que irme ya! —Ella me mira con su ceño completamente fruncido y sus pequeños puños están tornándose blancos de la furia con la que los aprieta. Ella está a punto de abrir su boca de nuevo, posiblemente para maldecir, así que decido hablar antes.

— Toma, son 20$, por si algo de lo que hay en las bolsas se ha roto. Realmente lo siento mucho —Ella los coge sin vacilar y aprovecho para salir corriendo.

15 minutos, 3 calles y un chico patoso; la historia de mi vida.

Bianca's POV:

Reviso las bolsas detenidamente y para encender más el odio hacia ése chico ¿De qué? ¿Dieciocho, diecinueve años? El frasco de pepinillos está roto ¡Joder, amo los pepinillos! Recojo mis bolsas y repito para mis adentros: Detesto con todo mi ser a ese alelado. Si le vuelvo a ver no dudaré en hacerle pagar y no me refiero a dinero, él ya hizo eso. 

Doblo en la esquina, doy cuatro pasos contados, me obligo a subir los infinitos escalones hasta mi ático, ya que el ascensor continua averiado, y ya estoy en casa. Hogar dulce... ¡Mierda!

***

¡Hey! Bueno, hoy me sentí inspirada y decidí subir un nuevo capítulo ojalá les guste, voten y compartan la historia.

PD: Gracias :)

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