Capítulo 14

169 19 7
                                        


La chica frunce el ceño ante mis palabras y se tensa al notar que estoy un paso más cerca. Al darme cuenta me disculpo y retrocedo pero ella continúa con el ceño fruncido ¿Qué está mal con ella?

— ¿Esperas que aparezca un hada madrina y me vista por arte de magia? —Pregunta y ríe sarcásticamente— Tapa tus ojos—Ordena, y se cruza de brazos, lo cual no esta ayudando en absoluto a mantenerme centrado.

Desplazo las palmas de mis manos hacia mis ojos y suspiro en frustración. No quiero hacer esto más incómodo de lo que ya es pero no puedo evitar responderle, ella me está tentando con su larga lengua.

— ¿Y qué tal si te tapas tú? Sería más fácil ¿No crees? Yo no soy él que va medio desnudo en casas ajenas —La cuestiono pero ella vuelve a reír ¿Qué es tan gracioso?

— Oh no, amigo; eso no va a pasar. Yo llegué antes, tengo el derecho de pasearme en bolas si me place. Tú eres él que ha entrado aquí como Pedro por su casa ¡Debería darte vergüenza! 

¡Maldita cínica!

— ¿O sea que no piensas vestirte? —Pregunto y retiro las manos de mis ojos— Entonces espero que no te importe que....—Y antes de que pueda terminar mi jugada, oigo el ruido de la puerta principal abrirse.

— ¡Ya estoy aquí! —Exclama una voz la cual reconozco al instante como la de Sophie y no puedo evitar la sonrisa que se plasma en mi rostro— ¡Ed, cuidado con la tarta!

Un golpe en mi hombro me devuelve a la realidad. La chica con la cual, ayer noche, choque de camino a mi trabajo está semidesnuda frente a mí mientras mi novia y su mejor amigo entran por la puerta principal del apartamento con una tarta.

La miro horrorizado mientras ella susurra— Esto no va a quedar así —Y se dirige de nuevo hacia el dormitorio de Soph.

— Andy —Dice Sophie extrañada— ¿Usaste la llave de emergencia?

Asiento, todavía atónito por lo que acaba de ocurrir y le extiendo el ramo de orquídeas.

— Son hermosas, gracias cariño —Pronuncia y coloca los almohadones del sofá— ¿Viste a Bianca?

Niego con la cabeza y meto mis manos en los bolsillos de mis jeans.

— De acuerdo ¿Por qué no vas a la cocina y ayudas a Ed con lo que sea que esté haciendo? —Pregunta ella entre pequeñas risas antes de darme un casto beso en los labios—. Iré a ver si Binky ya está lista y te la presentaré. Te encantará.

— Claro —Digo con una sonrisa nerviosa y desaparezco del salón. Al llegar al pasillo dejo escapar un suspiro y me encamino hacia la cocina.

La mejor amiga de mi novia, es esa clase de maldición andante que se hace llamar Bianca. Genial.

Bianca's POV:

— ¡Será gilipollas! —Exclamo entre dientes mientras me enfundo en el vestido verde petróleo y me calzo unos botines negros de Soph. Nunca antes nadie se había atrevido a contradecir y objetar acerca de cada maldita cosa que pronunciaran mis labios y menos un chaval vestido con camisa rosa y un ramo de flores en sus manos ¡Es ridículo! ¿Por qué no podía simplemente tapar sus ojos y morderse la puta lengua?

— ¿Binky? ¿Estas lista ya? —Pregunta Soph entrando por la puerta de su habitación.

Decido ignorarla y le doy la espalda mientras observo mi reflejo en el espejo de su cuarto. Finjo que no la he oído. Todavía sigo molesta con ella por irse sin dar explicaciones.

— Lo siento ¿De acuerdo? Pero fui a comprar la tarta favorita de mi madre para el postre. Tú ya la conoces, o está todo a su gusto o, simplemente, no está y hoy necesito que esté. Esta noche es importante para mí —Me explica, y la comprendo, su madre es exasperante la mayoría del tiempo— Y bueno, sobre Ed, me lo encontré de camino hacia la tienda y decidió acompañarme —Me volteo y allí está Soph, simulando la famosa cara tristona del gato con botas.— ¿Si te digo que estas espectacular me perdonas?

— Bien, estás perdonada, pero cambia de expresión facial. Me asustas.

Sophie aplaude y da pequeños saltitos. Agarra mi mano y prácticamente me arrastra contra mi voluntad hasta la cocina.

Allí están Ed, acabando de poner la mesa, y el impertinente de rosa, descorchando el vino.

Soph mete las flores en un pequeño jarrón de cerámica y llama la atención del chico rosado.

— Andrew —Dice y mis sospechas se confirman, se trata de su novio.

El joven se voltea y se acerca a nosotras con cautela.

— Bien, Andrew —Repite Soph.— Ella es Bianca Wayne, de la que tanto te he hablado; mi mejor amiga.

— Un placer —Pronucio y le extiendo mi mano acompañada de una sonrisa socarrona.

— Lo mismo digo —Dice, y estrecha mi mano.— Yo soy Andrew, Andrew Darby.

***

¡HOLA a todos! ¿Que tal están? ¿Las Directioners? Me sabe horrible, sinceramente, no soy fan incondicional pero si que conozco a los chicos desde el 2011 y escucho su música desde entonces y entiendo que el adiós de Zayn sea un gran palo. Solo queda ser realistas y ánimos a todos y todas.

Hablando sobre Serendipia, como pudieron observar, cambié de nuevo la portada y escribí un elenco ¡No duden en mirarlo!

Como norma decidí que como mínimo subiré un cap a la semana y si tengo tiempo o inspiración extra como mucho serán 2 en vez de tan sólo 1.

Xoxo

#EM

SerendipiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora