✖️IRRESISTABLE✖️

⚡️Capítulo 16⚡️

Jeongin se removió incómodo y abrió sus ojos al darse cuenta de que se encontraba solo en la cama de Hyunjin. Buscó con la mirada pero no encontró a su novio por ningún lado.

-¿Jinnie?- preguntó cuando escuchó pasos en las escaleras.

-Aqui estoy, amor. Solo fui a preparar el desayuno.- dijo mientras miraba al menor con una sonrisa enorme.

-Entonces desayunemos, hyung.- habló el menor desde la cama donde aún se encontraba acostado.

Quitó las cobijas que tapaban su cuerpo e intentó levantarse, pero un dolor en su trasero logró tumbarlo de nueva cuenta.

Hyunjin dejó el desayuno en la cama y corrió a ayudar a Jeongin.

-Despacio. Olvidé decirte que dolía.- el mayor puso uno de sus brazos debajo de las rodillas del menor y lo sujetó por la espalda, cargándolo al estilo nupcial. -Por eso compré una pomada para el malestar.

El docente besó la mejilla de su novio para después dejarlo lentamente en uno de los sofás que tenía en su habitación.

-E-Eso significa que t-tengo que poner la pomada... ¿en ese lugar?- dijo casi en un susurro y con la carita roja de la vergüenza.

-Si. Pero no tienes de qué preocuparte, yo te ayudaré.- el mayor sonrió seductoramente y después se largó a reír por el rostro rojo del más pequeño.

-T-Tengo hambre, hyung.- habló el menor para poder cambiar de tema a uno menos bochornoso.

-No te pongas tímido, Innie.- el mayor sonrió y se sentó alado de su lindo novio.

Hyunjin tomó un tenedor y comenzó a alimentar a Jeongin con las frutas que había cortado hace unos momentos.

-¿Está rico, Jeonginnie?

-Si amor.- dijo haciendo una mueca de satisfacción mientras que el mayor se encontraba boquiabierto y sorprendido.

-Es la primera vez que me llamas "Amor". Por lo general eres muy tímido para los apodos.- dijo mirando al menor con una media sonrisa y con los ojos brillantez.

-Bu-Bueno, es que tú siempre me dices... cosas muy bonitas.- hablo mientras su carita se ponía de un rojo carmín, para después meter un trozo de manzana a su boca.

-Eres tan lindo.- dijo y miró con una sonrisa de enamorado a Jeongin por todo lo que restó del desayuno.

Después de eso tuvo que convencer al menor de que se dejara untar la pomada que había comprado para el. Pero Jeongin se negaba a que su hyung mirara su trasero.

Eso era ilógico ¿cierto? Ya que Hyunjin lo había tocado y visto desnudo el día anterior, pero le seguía dando vergüenza y cada vez que le insistía se ponía rojo y tembloroso.

Pero no se esperaba que su Jinnie se aprovechara de su dificultad para moverse.

Estaban recostados en la cama del docente mirando la televisión, cuando de pronto Hyunjin se acercó muy sospechosamente a él.

Acarició su cintura, y con mucha agilidad lo atrajo hasta su propio cuerpo para después ponerlo boca abajo.

Tomó la pomada de la mesita de noche y comenzó a bajar los pantalones del más pequeño. Levantó su cintura haciendo que su entrada quedara a la vista y comenzó a aplicarla cuidadosamente.

-Jinnie, no.- se quejó él menor cuando sintió uno de los dedos del mayor aplicando el producto en su lastimada entrada. -Despacito, hyung.

-Ahora ya no dolerá más, bebé.- habló y le regaló un beso en la mejilla a su lindo novio. -Perdón si fui muy brusco. Suelo ser un bruto si se trata de delicadeza.- acarició la espalda de Jeongin y subió la ropa interior del contrario junto con sus pantalones de pijama.

-Esta bien, amor, ahora ya no duele tanto.- dijo con un lindo puchero adornando su boquita.

-Eres tan lindo y dulce. Por eso te amo, Innie.- Hyunjin se acomodó a un lado de Jeongin y lo abrazó, de manera que la cabeza del más pequeño quedara en su fornido pecho.

-Yo te amo más, Hyunjin.- dijo mientras respiraba el rico olor a perfume para hombre que desprendía su hyung.

El mayor sonrió y se abrazó aún más fuerte del cuerpo del menor.

-No se que haría sin ti, siempre logras alegrar mis días, precioso. Así que ni se te ocurra abandonarme y dejarme por otro porque lo mato.

Jeongin soltó una risita y despegó su cabeza del bien formado pecho de su guapo novio.

-No te voy a dejar por otro. Todos son feos y tontos comparados con un hombre como tú, Jinnie.- dijo mirándolo a los ojos con una sonrisa encantadora.

-¿Entonces soy guapo, Innie?- preguntó mientras hacía una cara seductora.

-Si Jinnie, eres muy guapo.

Entonces estamos hechos él uno para el otro.- miró a Jeongin y le guiñó el ojo.

El menor sonrió e impulsó su cuerpo para poder alcanzar el rostro de su Hyunjin. Lo sostuvo entre sus manos y lo besó con amor.

El mayor tomó el control del beso y se colocó encima de Jeongin. Tomó el elástico de los pantalones del menor y los bajó con rapidez.

-Me alegra que no haya clases en toda la semana.- dijo el mayor mientras colaba sus manos por debajo de la ropa interior del más pequeño. -Así podré hacerte el amor todos los días.

Jeongin se quedó en shock y se imaginó sin poder caminar por un largo largo tiempo. Y reaccionó cuando sintió que ya no traía ninguna prenda puesta.

Miró en dirección a Hyunjin y se sorprendió mucho cuando se dio cuenta de que el mayor ya estaba listo para hacer de las suyas.

-Otra vez no, por favor.

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XD se viene lo bueno.