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Seo se encontraba repasando por quinta vez el plan que había elaborado para sacar a Felix de ese sitio, y como la primera vez, lo dijo correctamente.
Y justo como si el mundo estuviera en su contra, la noche cayó tan rápido como era posible y era tiempo de llevar a cabo su plan.
Se reúne con JiSung a media noche, ambos tenían todo preparado.
—Sé que es un poco tarde, pero, ¿estás seguro de querer hacer esto? —Pregunta ChangBin a JiSung quien se encontraba a su lado, esperando la orden para iniciar la operación: Rescatar al dulce príncipe.
—Por supuesto.
—Hacer esto se consideraría como traición, podrían matarte si te atrapan. Tampoco podrás regresar a este castillo... tal vez ni siquiera al país.
—Está bi... ¡¿Y me lo dices ahora?!
—Creí que ya lo sabías.
JiSung suspira. Tenía que dejar atrás a su familia, a su cachorro que no era su cachorro y a... MinHo. Así que su vida valía menos que nada para él en esos momentos.
—No importa. Seguiré con esto. De todas maneras, ya no tengo nada aquí. Dime, ¿Qué sucederá después?
—Tenemos dos opciones, número uno; Sacar a Felix con vida y esconderlo en alguna aldea por el tiempo necesario hasta que él decida qué hacer con su vida, y tú irás con él. Número dos; Sacar a Felix con vida, asesinar al Rey y hacer que Felix tome la corona. Un golpe de Estado, prácticamente.
—¿Él elegirá?
—Sí, lo hará. ¿Alguna protesta?
—No, todo es perfecto.
—Empecemos, entonces.
—Claro. Si voy a morir, espero que sea por una buena causa. No, lo será. Podré salvar la vida de la persona que más aprecio. YongBok es como un hermano para mí. ¿Sabes? Le debo la vida... Siempre fui muy torpe, personas como yo son innecesarias en este tipo de lugares. Una vez, cometí el error de tropezar frente al Rey. No lo golpeé por accidente, no lo rocé, ni siquiera lo toqué, pero eso fue más que suficiente para que ese hombre me sentenciara a muerte... tenía sólo diez años. Entonces, Felix llegó como si no le temiera a nada y le gritó al Rey. Le dijo que no podía hacer eso, que si yo moría, él también. ¿Puedes imaginarlo? Estaba dispuesto a dar su vida por un completo desconocido. —Y Han ríe con dulzura —. Por alguna razón, eso fue más que suficiente para convencer al rey de "perdonar" mi vida. Desde ese día, le juré lealtad eterna. Nunca creí que realmente fuera a suceder una situación como esta, pero si es necesario, estoy dispuesto a morir por un alma tan bondadosa como la de Felix.
—Entonces, demuéstralo. Ve ahora y arriesga tu vida para salvar a Lee.
—Con mucho gusto. —JiSung estaba a punto de salir corriendo hacia la habitación en donde tenían a Felix para distraer a los guardias, pero alguien lo tomó con fuerza de la camisa por la parte de atrás, haciendo que cayera al piso.
