•Advertencias: Spoilers hasta el capitulo 208 de la NOVELA.
•Etiquetas: POV Xie Lian, Canon divergence, manipulación emocional, engaño, revalación de identidad, angst, Mal final. Centrado en Xie Lian, menciones Hualian.
•Palabras: 3,351
•Sinopsis:
Ante la corte celestial, Xie Lian mira como Guoshi lo señala como la calamidad vestida de blanco. Y ya no sabe quién es él realmente.
O Jun Wu interrumpe la declaración de Mei Nianqing y se lleva a un confundido Xie Lian a su palacio.
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-En este momento, White no Face está dentro de este Gran Salón Marcial, ¡está parado justo delante de mí!
Una vez que Guoshi lo señala en la corte celestial, Xie Lian pierde todo aire que pueda haber en sus pulmones. No es capaz de escuchar los alaridos o evocaciones de los demás dioses, por los cielos y la tierra que no podía. Porque su mente se encontraba eclipsada por varios recuerdos que llegan de golpe, como una inminente colisión de las feroces aguas contra un imponente acantilado.
Recuerda, recuerda desde lo profundo de sus entrañas la primera vez que vio su rostro en el de Bai WuXiang, y cuando vio el de Bai WuXiang en el suyo. Cuando descubrió la máscara para encontrarse con un espejo, y cuando se cubrió con ella una vez que ese espejo se encontró roto.
Recuerda, la cálida sensación de estar en sus brazos después de que lo había destrozado hasta no soportar más dolor. Recuerda sus lágrimas ser limpiadas con la suavidad tan íntima por la persona que empuñó la espada que perforó incesantemente su cuerpo, corrompiendo sus vísceras, y ahora estaba ahí para reunir los pedazos del alma que él mismo había aplastado. Siendo el único que estaba ahí, el único que seguía ahí.
En todos esos años, en ochocientos años le era imposible olvidarlo. Estaba grabado en sus párpados, en cada pestaña; en su piel, por cada poro; en su sangre, a cada latido; en su alma , en cada respiro.
Eran incontables las noches en las que Xie Lian se despertaba gritando al recordar vívidamente la sangre saliendo de su garganta, de su pecho, recordando la sensación de no poder gritar por misericordias, no poder recuperar el aliento mientras intentaba inútilmente sollozar o siquiera respirar, solo pudiendo llorar y pedir perdón en su mente.
¿Por qué necesitaba ser perdonado? ¿En qué se equivocó?
Perdón por no poder soportarlo, perdón por no poder salvar a su reino o a su gente, perdón por ser tan miserable. Se equivocó en pensar que era lo suficientemente fuerte. Antes se había sentido capaz de salvar el mundo siendo un dios, un inmortal, hasta que se dio cuenta que la inmortalidad no era más que una ilusión y la divinidad una fantasía cruel.
