Diáfano

Extra 2

Tema sensible: El aborto

Te pido que por favor si no estás de acuerdo o es un tema sensible para ti y no quieres leerlo, puedes hacerlo hasta la señal:
(***)

Por favor no juzgues mis opiniones así como yo no juzgaré las tuyas y si es que te quedas para leerlo, no intentes crear una revolución para que las personas piensen como tú porque no todos deben tener las mismas ideologías y eso está completamente bien y es respetable.

En la nota del final les dejaré unas palabras más. Ahora si, comencemos.

"Fiore del giardino"

— Adelassia Fiore—

~1 de Noviembre del 2020~

A la mierda todo.

Intento abrir mi corazón por primera vez y un estúpido viene y lo rompe como si no me hubiera costado trabajo abrirme ante él. De nuevo, Kate ha hecho de las suyas y cumplido la promesa de separarme de cualquiera que se enamore de mi.

Es bonita, claro que lo es, el problema es que ella lo sabe y lo utilice para hacer mal hacia las personas. Creí que habíamos dejado todo eso atrás, creí que nos habíamos superado por fin y que además de dejar de odiarme por abrirle los ojos a mis hermanos, tal vez seríamos amigas algún día de nuevo.

¡Pero que estúpida he sido! Claramente las personas no cambian como todos quisiéramos que lo hicieran. Ella se ha esmerado en hacerme saber que tendrá a cualquiera que ella quiera y que yo no tendré a nadie por el simple hecho de que ella es bonita y yo no.

Una de mis inseguridades más grandes siempre ha sido mi físico. Estoy consciente de que no tengo las medidas de 90, 60, 90 que todos quisieran tener y mucho menos el abdomen plano o cuerpo de modelo que son los mayores estereotipos de belleza por los que se rige esta sociedad.

Mientras que yo soy común y corriente, ella lo tiene todo. Podrá sonar a envidia pero es que me he hartado de que ella siempre se meta con los que me gustan o arruine las cosas a mi al rededor. No tengo idea que es lo que le hice para que me odie tanto.

Hago sonar el timbre de Blake de nuevo y espero a que me abra la puerta. Ella no tarda y al abrir paso de nuevo directo al refrigerador como ayer en la mañana, claramente hoy estoy más tranquila pero necesito otra dosis del helado de ayer.

— ¡BLAAAAAKE! — gritó al encontrarme con un congelador lleno de verduras en bolsa.

— ¿Qué pasa Ada? — contesta alarmada.

— ¿Dónde quedó mi helado? — alzó la ceja y me cruzo de brazos, resignada.

— Te lo llevaste ayer y no me dejaste comer a mi tampoco — contesta ella, fulminándome con la mirada.

Mierda, es cierto. Cierro el congelador y abro el refrigerador para sacar un yoghurt bebible. Es de fresa y sabe bien así que me dirijo hacia su habitación y me siento sobre su cama. Ella me mira expectante desde el marco de la puerta mientras yo tomo tranquilamente mi yoghurt, pero comienza a estresarme sentir sus ojos sobre mi.

— ¿Qué? — suelto.

— ¿Venías a hablar o a tragar?