Gabriel se quedó en silencio y creí que no le había gustado nada de lo que escribí. Para ser sincera en ese momento pensé que era una escritora horrible.
—América, eso está increíble.
—Sólo es algo que escribí, no es nada importante.
—Supongo que tu eres la niña, pero ¿quién es el ángel?—preguntó con curiosidad.
—Creí que lo sabías—contesté. Por supuesto que el era el ángel del cual hablaba en mi cuento. Gracias a él estaba empezando a ver la vida desde otro ángulo.
—América, yo...—tartamudeó un poco. Lucía un poco nervioso y supuse que quería contarme algo importante, pero jamás imaginé que escucharía esas palabras—tú, me gustas mucho. Me siento extraño cada vez que te me acercas y quisiera detener el tiempo para que nunca te fueras de mi lado. Llámame loco, pero creo que hasta me gustan las muecas raras que haces. Se que ahora mismo, no tienes tiempo para sentimientos estúpidos y que existen un montón de problemas que te atormenta, pero debía decírtelo. Ya no podía seguir callandolo—bajó su mirada avergonzado y yo lo miré con ternura. Nunca había recibido una declaración de amor, de hecho los chicos que se me insinuaban sólo me decían cosas de mal gusto.
—Jamás digas que tus sentimientos sin estúpido. Tienes razón en decir que tengo un millón de problemas pero eso no me impide sentir algo por ti. También me gustas, Gabriel—cuando pronuncié aquellas palabras su mira se iluminó y recuerdo que me abrazó muy fuerte.
Si alguien me hubieran dicho que yo acabaría enamorandome de alguien, sin despreciarme a mi misma por tener la osadía de sentir y dejarme llevar, me hubiera reído a carcajadas en la cara de esa persona.
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Buscando mi sonrisa [Sonrisas Parte I] [Cristiana]✅
Short StoryAmérica es un triste chica que quiere desesperadamente que su dolor desaparezca, entonces conoce a Gabriel, un ángel que le abrirá las puertas del cielo y las de un mundo eterno lleno de paz. Porque no hay nada más maravilloso que el amor de un pad...