Cuando me detuve sobre aquel abandonado jardín sin rosas me arrodillé y levanté mi cabeza. Cerré mis ojos y con la lluvia empapado mi cara dije una palabras que nunca me arrepentiría de pronunciar.
—Sé que sólo soy una pobre desgraciada que no merece nada, pero me han dicho que a ti no te importa nada de eso, que tu no me vas a señalar por mis malas decisiones, sólo me ayudarás y eso es lo que más deseo. Si aún no es tarde me gustaría dejarte entrar. Te abro las puertas de mi corazón y te pido perdón por haber estado ignorando cada vez que llamabas—suspiré entre sollozos—Me gustaría que a partir de este momento mi corazón y mi alma sean tuyos. Te entrego todo lo que soy, me pongo en tus manos para que guíes mi camino y que de manera sabia me ayudes a actuar. Sé que contigo nunca más me sentiré sola. Perdóname por todo lo malo que he hecho, por ser tan inconsciente y cobarde y en su momento pensar que acabar con la vida que me permitirse vivir serviría de algo. Perdóname por dejarme caer y no luchar como debería haber hecho.
La lluvia tan fuerte que antes caía había disminuido de forma considerable cuando abrí mis ojos.
—Gracias—susurré cuando la paz se apoderó de mi. Sentí tranquilidad, él estaba conmigo y nunca más me apartaría de su lado. Dios me amaba y al darme cuenta de eso sonreí. Sonreí como no hacía hace tanto tiempo.
Ahora estaba consciente de que el me cuidaba y protegía, ya no tenía miedo. Era el momento de afrontarlo todo, debía perdonar como Dios me había perdonado a mi y aunque estaba segura que eso no resolvería nada con mi familia, si que me aliviaría porque el rencor no era nada bueno.
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Buscando mi sonrisa [Sonrisas Parte I] [Cristiana]✅
Cerita PendekAmérica es un triste chica que quiere desesperadamente que su dolor desaparezca, entonces conoce a Gabriel, un ángel que le abrirá las puertas del cielo y las de un mundo eterno lleno de paz. Porque no hay nada más maravilloso que el amor de un pad...