Aún te sigo esperando [Foxy y tú]

Capitulo 1: Encontrar

Narrador

Era un día especial, hoy era el cumpleaños número 11 de __tn y hace muy poco se había inaugurado una pizzeria. "Freddy Fazbear Pizza" (que al parecer era más una re-apertura que otra cosa); los padres de __tn habían decidido darle lo mejor de lo mejor a su hija aún sí no eran de la clase más alta. Después de todo, era su cumpleaños.

-A donde vamos?- preguntaste desorientada; viendo a tus padres cómplices.

-Ya verás amor, es sorpresa- contesto sonriente tú madre.

Todo el viaje fue callado, el lugar no estaba muy lejos por lo que después de cuatro cuadras tus padres se detuvieron y te miraron tiernamente.

-Ahora, cierra tus ojos- exigió de forma amable tú padre.

-Y sí me caigo?-.

-Confía en nosotros, no caeras y sí lo haces, te afirmamos- propuso y aseguró tú madre.

-Está bien- en eso cerraste tus ojos y tus padres te tomaron de las manos, mientras comenzaban a caminar (tú con cierto miedo a tropezar y caer directamente al suelo); fue cuando debiste detenerte y esperar alguna palabra de tus padres.

-Abre los ojos- ese era tú padre.

Al abrir lentamente los ojos pudiste ver a muchos niños corriendo, riendo y jugando dentro del restaurante.

No lograbas decir nada, al entrar al local miraste cada detalle, (parecía una jugueteria) hasta mirar a un escenario, en este habían tres personajes muy peculiares:

Uno era un oso marrón, llevaba un corbatin, un sombrero de copa y dos botones. Todos color negro; otro era un conejo bastante afeminado color celeste con un corbatin rojo y pestañas muy largas. Realmente dudabas sí era hembra o macho y por último una pollita que llevaba a pantaleta rosa y un babero blanco en el que se veía escrito "Let's Party!!!"

-Bueno __tn, ¿porqué no vas a jugar? Nosotros pedimos pizza- propuso tu madre.

-Bien, iré a explorar- al terminar de decir eso saliste corriendo hacia otra sala de la gran pizzeria. En está sólo habían mesas con gorros de cumpleaños y por decoración habían algunos globos.

Observaste detenidamente, buscando algo interesante pero al no ver nada más que mesas te fuiste a uno de los pasillos, habían algunas puertas que parecían más interesantes que la anterior pero te estuviste frente a una que decía "Partes&Servicios" Observaste la puerta y parecía menos interesante que las anteriores pero por lo que tus padres te an enseñado no todo es lo que parece.

En un principio dudabas sí debías entrar o no; pero una valentía inata vivía en ti por lo que tus manos accedieron a girar la perilla. Al abrir la puerta (no por completo) y aún sosteniendo la perilla con tus dos pequeñas manos y estando en puntillas sólo viste oscuridad, era perfecto, ni una pica de luz entraba a la habitación, el único rastro de luz provenía del pasillo en el que aún te encontrabas y no era suficiente para alumbrar más que la entrada de la oscura sala.

Al dudar sí había algo interesante en las demás habitaciones decidirse dar un paso para entrar a Partes&Servicios; la luz que se asomaba por la puerta no era de mucha ayuda por lo que buscaste una pared para apoyarte y poder caminar con un poco más de seguridad pero después de diez pasos, caiste como un costal de papas al suelo. Y está vez no fue por tus pies torpes, estabas segura de que era por que tropezaste por algo ¿pero qué?

-Mh...extraño- escuchaste una voz joven-adulta venir desde afuera.

-¿Qué ocurre?- está vez hablo alguien con una voz algo más grave.