Obsesionado

🔥The stripper🔥

Mi cabeza daba vueltas, estaba confundido, ¿Cómo pudo hacerme esto mi madre?, intentar arreglarme un matrimonio con una mujer que no conozco por el placer de aumentar las ganancias de nuestra empresa, no, no se lo iba a permitir.

Esa tarde salí enfurecido de la casa de mi madre, me había invitado a cenar para contarme la maravillosa noticia, casi me caí de la silla de su costoso comedor.

-Bright, quiero que conozcas a esta joven este fin de semana, ya tienes 30 años y debes sentar cabeza, además me parece una excelente oportunidad de crear una buena estrategia comercial, este noviazgo y posterior matrimonio beneficiará a ambas familias.

-¿De qué diablos me estás hablando? ¿Te das cuentas de que es de mi vida de la que hablamos? jamás me casaré con alguien que no ame, me da igual su status social y me vale que sea para apoyar tus negocios- Salí de su casa sin terminar mi cena.

Tomé mi teléfono para hablar con Mike, mi mejor amigo y mano derecha en la empresa de publicidad, necesitaba un trago y despejar mi mente.

-Aló, Mike ¿Dónde estás? ¡Necesito un trago urgente!- mi voz sonaba iracunda.

-Oye ¿Qué pasa? ¿Vas a beber? ¿En serio? El gran señor empresario ultra ocupado me va a acompañar a beber...no lo puedo creer, quiero verlo.

-Deja de molestarme idiota, ¿Me acompañas a o no?

-Por supuesto que sí ¿Cuándo te he fallado?, pero estoy llegando a mi local nocturno, debo revisar boletas y facturas, sé que no te gusta este lugar, pero puedes venir y charlamos en mi oficina.

Mike además de trabajar conmigo en la empresa se había hecho de un club nocturno hace unos años atrás, según él era su plan de retiro, según yo, era la excusa perfecta para ver mujeres y hombres desnudos, yo no tenía nada en contra de eso, simplemente no me agradaba.

Tomé mis llaves y conduje el Lamborgini hasta el club nocturno "Butterfly". En el lugar me encontré con el local repleto de gente, hombres y mujeres stripper bailaban en las mesas, el lugar era una locura, nunca había estado en uno así antes, pero necesitaba arrancar de la realidad un momento.

Entré a la oficina de Mike, hablamos un rato, estaba ahogado, todo esto con mi madre me tenía mal, mi padre había fallecido hace cinco años, nos tocó a ambos hacernos cargo de la empresa, levantarla y posicionarla dentro de las tres mejores en publicidad,   trabajé duro, pero mi madre se había vuelto una mujer ambiciosa y quería más. Mike me esperaba con una botella que ya iba casi por la mitad.

¿Por qué no sales un rato y das una vuelta? de seguro encuentras algo entretenido que hacer, despéjate un rato y olvida el mal rato, verás que luego se le pasa a tu mamá esa tonta idea y tú encontrarás a la persona de tu vida- dijo esto llevándome casi obligado hasta la puerta de su oficina.

Tomé aire y salí a caminar, mujeres se me acercaban y se ofrecían literalmente, no me gustó.

De pronto mi mirada se quedó fija, la criatura más hermosa que había visto bailaba en un caño en unos de los escenarios, su performance era espectacular ¡Nunca había visto a un hombre mover las caderas así! y parece que medio local nocturno se dio cuenta de lo mismo que yo, hombres y mujeres lo aclamaban, yo como hipnotizado me acerqué hasta quedar casi al frente de él.

Movía sus caderas de forma candente, parecía un experto sobre ese caño, yo sentía que le hacía el amor, mi piel se erizó ante ese pensamiento, se acariciaba los muslos de manera retorcidamente erótica, se tocaba y yo podía sentir su suave piel bajo mis dedos, poco a poco se sacaba la ropa hasta quedar en un diminuto adminículo que cubría escasamente su parte anterior y dejaba ver toda su retaguardia, mis labios se secaron, muchas personas se acercaron a depositarle billetes en la pequeña ropa interior o simplemente se los arrojaban al escenario, él sonreía. Yo quería seguir viéndolo y mientras seguía perdido en mis pensamientos, unos brazos rodearon mis hombros.