EPILOGO
Parte A
Unas semanas después, los conocidos y amigos de riguroso luto llegaban a la Iglesia donde se celebraría el funeral de Patricia Ibáñez.
Todos seguían sorprendidos por la repentina muerte...
Nadie lo sabía, pero Esteban San Román movió todas sus influencias para hacer parecer que se trató de un accidente, y no de un asesinato.
Arturo estaba destrozado, en primera fila presidiría el funeral, decidiendo no someter a su hijo a una tortura como esa, lo dejó en casa.
Por un pequeño retraso, Esteban fue el último en llegar, también de negro y con su mujer tomada a su brazo.
Una María conmocionada, llegó con un ramo de flores blancas en su brazo libre, todavía no podía creer que su amiga estuviera muerta.
*******************
MANSIÓN SAN ROMÁN
Ya entrada la noche volvieron a casa, María y Esteban acompañaron en todo momento a Arturo, quien se había quedado dormido, pero de tanto beber.
"Está muerto en vida..." — Le dijo ella.
"Tiene un hijo y debe recuperarse..." — Reflexionó Esteban.
"No debe ser fácil perder a la persona que amas..."
Esteban abrazó a su esposa, asustado por la sola idea de perderla a ella.
"Debe ser lo peor del mundo... Igual que perder un hijo..."
"Vamos a ver a los niños..." — Pidió María después de besarlo.
Héctor y Estrella dormían plácidamente y eso alegraba el corazón de todo padre.
-Habitación Principal-
Ya metidos en la cama, ni María ni Esteban podían conciliar el sueño, las últimas semanas habían sido una pesadilla.
"Esteban..." — Susurró María para saber si su marido dormía o no.
"¿Si mi amor...?" — Se volteó él y ella se recostó en su pecho.
"No puedo dejar de pensar que si hubiéramos ido al viaje, Patricia estaría viva..."
"María, la asesinaron... Eso iba a pasar tarde o temprano..."
"Pero, ¿quién fue??"
"No se ha esclarecido todavía... Lo cual es extraño."
"¿Quién quería matarla??"
"No lo sé... Pero dudo que alguien desconocido lo hiciera, es ilógico..."
"¿Acaso crees que fue...?"
"Te juro que quiero quitar esas sospechas de mi cabeza, pero es imposible... Todos los que viajaron a Aruba, pudieron matarla."
"¿Incluidas tus tías??"
"Ellas también fueron..."
"Quien me preocupa ahora es Leonel... Y Arturo por supuesto... Están solos..."
"Nosotros vamos a ayudarlos en lo que podamos... Ya mi vida, intentemos dormir..."
*******************
Días más tarde, María salió con los niños, buscarían a Leonel para jugar un rato en el parque.
Eso lo sabían Alba y Carmela, que encontraron ese el mejor momento para hablar con Esteban antes que volviera a las empresas.
ESTÁS LEYENDO
Un Amor para la Historia
Fanfic¿Cómo se conocieron María Fernández Acuña y Esteban San Román? Un amor y una historia que ha inspirado a muchas otras más...