Plan "conquista" en marcha

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El camino de regreso fue casi en silencio, volvieron al restaurante de la playa, Jimin, Taehyung y Yoongi bajaron del auto despidiéndose de Jungkook.
Jimin miró a los otros dos y rápidamente los saludó y entró a su departamento.

Yoongi bufó frustrado, Taehyung sonrió ante la actitud de su amigo.

-Al parecer mi primo te gusta más de lo que quisieras- comentó con algo de sarcasmo.

Caminaron hasta el automóvil estacionado y se pusieron en marcha hacia la finca Park

-¿Me puedes decir cómo demonios puedo acercarme a él sin que me muerda?- exclamó mordiendo su propio labio inferior.

-Bueno una mordida no estaría mal- dijo divertido mientras el otro rodaba sus ojos.

-Todo lo que tiene de lindo lo tiene de antipático y amargado, y yo creí que yo era el antisocial- gimió y volvió a morderse sus labio.

-Mira, esto es simple, si te gusta intenta conquistarlo, después de todo lo que cuesta tiene mejor sabor, pero si solo quieres un polvo, entonces ni te gastes, con Jimin no llegarás a nada, ya lo has visto, no sale con nadie y mucho menos se acuesta con alguien, y no es porque sea un puritano, porque ha tenido parejas y chicos ocacionales, pero llegar a él no es para nada fácil. Lo siento amigo, no creí que caerías tan rápido, aunque lo imaginé, Jimin es irresistible y todo un desafío, además de que es tu tipo por supuesto- explicó Tae mientras estacionaba en el frente de la gran mansión.

-No sé si me gusta, me excita o me quiero casar con él, pero si puedo decirte que jamás había tenido la necesidad de pasar tiempo con alguien, al menos hablando, lo cual es raro, ya que generalmente solo me interesa el sexo- soltó Yoongi mirando a su amigo que ya tenía una sonrisa pintada.

-Entonces ve por todo cariño, pero si te enamoras luego no me eches la culpa- sus palabras salieron con burla y diversión.

Yoongi solo rodó los ojos y entraron a la casa, aunque no pudo evitar pensar en las palabras de su amigo.

Se despertó más temprano de lo que hubiera querido, la luz del sol colándose por el gran ventanal hacía difícil que pudiera seguir durmiendo.
Pensó en varias cosas, aunque todas se resumían en lo mismo, Park sexy y antipático Jimin. Se sentía frustrado nunca le había gustado alguien tan rápido y mucho menos que no se interesara en él. Generalmente con una sonrisa y un par de cursilerías tenía a cualquiera bajo sus pies, o mejor dicho bajo su cuerpo. Pero Jimin era todo un reto y eso lo atraía aún más.
Se levantó y se dio un cálido baño, bajó las escaleras y se encontró con el señor Park que bebía café tranquilo en la cocina.

-Buenos días Yoongi- saludó el hombre con una sonrisa.

-Buenos días señor Park- devolvió el saludo haciendo una reverencia.

-¿Se divirtieron anoche?- preguntó.

-Si, estuvo bien, fuimos a un bar del amigo de su hijo- explicó mientras de servía café.

-¿Al bar de Chanyeol?- indagó asombrado.

-Si a ese, Jungkook lo propuso- comentó y se sentó frente al hombre.

-Imagino el malhumor de mi hijo- exclamó risueño.

-La verdad no le gustó para nada ir alli-

-Lo sé, Jimin odia los tipos pedantes como Chanyeol, para conquistar a Jimin las cosas deben ser claras, le gustan las sorpresas aunque no lo parezca  y un paseo por la playa es más que suficiente- informó con una sonrisa cómplice.

-¿Por qué  me dice esto?- cuestionó asombrado

-Porque soy viejo y veo más allá de lo que un joven como tú puede ver. Me he dado cuenta de que Jimin te gusta y tu le gustas a él- dijo aún más sonriente.

Un verano para recordar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora