Prueba de amor, parte 2

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Taehyung entró con sus ojos en llamas, miró a Hoseok y luego a Jimin.
-¿Qué carajos es esto?- preguntó sumamente encolerizado.

-Nada- escupió Jimin intentando salir de allí.

-Acabas de presentar a mi mejor amigo como tú novio y te encuentro en la cocina besandote con tu futuro cuñado,  no me digas que no es nada Jimin- exclamó aireado.

-¿En serio crees que besé a Hoseok?- preguntó totalmente desencajado.

-Fui yo, yo lo besé, él ni siquiera me correspondió, no lo hizo antes y no lo hará nunca- dijo casi en un susurro y con sus voz estrangulada.

-¡Acabas de pedirle matrimonio a mi prima y besas a su hermano imbecil!- gritó aún más cabreado.

-¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué juegas con mi hermana Hoseok?, ¿por qué le pediste matrimonio si no la amas?- indagó totalmente enfurecido.

-¿Qué?, ¿qué dijiste Jimin?- la voz dulce y quebrada de Hyorin retumbó en la cocina.

Hoseok volteó a verla, sus ojos estaban bañados en lágrimas.
Yoongi estaba parado detrás de la joven y podía darse cuenta lo mal y enojado que estaba Jimin.

-Hyo, escucha- soltó su hermano acercándose a ella.

-No, no quiero escucharte a ti Jimin, quiero que Hoseok me responda. ¿por qué  mi hermano dice que no me amas? Habla de una vez Hoby por favor- dijo casi desesperada.

-No es así, yo si te quiero...

-¿Pero?- preguntó totalmente angustiada.

-Pero amo a Jimin, lo siento Hyo, intenté, te juro que intenté enamorarme de ti y olvidarme de él pero no pude, no puedo- sus lágrimas rodaban sin pausa mientras hablaba.

-Vete de mi casa y no se te ocurra volver- la voz grave del señor Park los hizo a todos voltear a verlo.

-Yo, lo siento señor, le juro que no queria-

-¿Qué es lo que no querías?, ¿jugar con mi hija?, ¿hacer que entre hermanos se peleen?, ¿esperar a que Jimin te corresponda?, dime qué carajos querías Hoseok, porque no voy a dejarte que lastimes a mi pequeña ni que crees una distancia entre mis hijos, así que vete y no vuelvas- soltó entre dientes tratando de controlar su bronca.

Hyorin miró a Jimin quien sentía su pecho arder de solo imaginar que su hermana podía odiarlo.
Caminó hasta él y se colgó de  su cuello.
-Llevame a mi cuarto Chimy, no quiero ver a nadie- susurró con sus lágrimas brotando de dolor.

Jimin la tomó entre sus brazos y la levantó para subir las escaleras y encaminarse hasta la habitación de su hermana.
La depósito sobre la cama, se sentó junto a ella y la abrazó con fuerza, dejando que llorara todo lo que necesitaba.

-Lo siento tanto pequeña- soltó despacito mientras acariciaba su cabello y su espalda.

-No es tu culpa, yo, yo siempre lo supe, pero tenía la esperanza de que se olvidara de ti y me amara a mi, supongo que es tonto intentar obligar a alguien a que te ame- exclamó con sus ojos rojos y sorbiendo su nariz.

-Tampoco es tu culpa, te enamoraste y lo intentaste, el problema es de él por no haber sido sincero contigo. Yo de verdad no quería pequeña-

-Ey, tranquilo, jamás podría enojarme contigo, siempre supe que jamás correspondiste a sus sentimientos y siempre fuiste claro con él. Yo solo creí que a lo mejor el me amaría alguna vez-

-Te mereces un hombre bueno que te ame solo a ti, alguien que respire y suspire por ti, eres demasiado valiosa, eres un tesoro, el tesoro de los Park, jamás voy a dejar que te lastimen, te lo juro mi pequeña- susurró mientras besaba sus mejillas y acariciaba su cabello tiernamente.

Un verano para recordar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora