22. Haciendo trampas.

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READYS?!

———————————————————————————-Te olvidaste la parte en la que siempre me protegerías-——————————————————————————-Povs Jennie

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-Te olvidaste la parte en la que siempre me protegerías-
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Povs Jennie

Las heridas eran notorias, los puños de Taehyung le habían dejado bastantes maratones y alguna que otra brecha.

Dentro de mi estado de no comprender nada, entre el shock, con todos hablando, insultándose y V mirándome como me miraba con ganas de matar a Baek, le cogí de la mano, y me fui directa a mi habitación donde así podría estar tranquila, y que me explicase todo con detalle.

-¿Te duele mucho?- pregunte cuando se echó para atrás al ponerle agua desinfectada.

-Yo estoy bien-

Es muy difícil no ponerme a la defensiva cuando todo el mundo te trata como una bola de cristal.
-Yo también lo estoy eh-

-Permíteme dudarlo-

-Pues créetelo porque hablo enserio, estoy bien-

-Jennie- me bajo la mano para que le mirase bien. -Se de lo que hablo, se quien es Vincent, y entendería que estuvieses cagada de miedo-

Seguí con lo mío apretando fuerte en la herida, le oí quejarse pero me puse a pensar en mis cosas, no me iba a acojonar, la última vez que tuve miedo pasaron cosas, he decido muy bien a partir de eso, ahora soy una narcotraficante, tengo el mejor equipo del mundo, y a las mejores amigas.

No le voy a tener miedo a un tarado.

-¿Te ha dolido eso?- pregunte molesta.

-Un poco si-

-Bien- me levante del sillón y recogí las cosas rápidamente.

-Y ahí está la Jennie que conozco-

Se puso de pie mientras reía, escuché sus risas, pero ni me di la vuelta y seguí con lo mío.

-La Jennie que conoces ya no esta- deje claro sin mirarle. Ya no recuerdo como era yo.

Se puso delante mío, su altura hacía bastante contraste con la mía y si le quería mirar tenía que levantar la cabeza, lo cual no iba a hacer.

-Sigues siendo la misma cabezota que piensa que puede con el mundo entero-

Me quede callada, ¿que se supone que tiene que significar eso? 

-Y tienes toda la razón del mundo, te puedes comer el mundo y más si se te da la gana, pero joder, confía en nuestra ayuda- soltó confiado.

Ahora si un poco más de atención, ahora mismo sentía que la ayuda de la gente me agobiaba, ellos pensaban que el tema Vincent era grave, y yo quería pensar que no, pero a lo mejor es hora de que me enfrente a la grandeza del problema.

𝑸𝒖𝒆 𝒂𝒓𝒅𝒂 𝑺𝒆𝒐𝒖𝒍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora