27. Nadie la toca

2.3K 77 34
                                    

He vueltoooo! disfrutar de este cap por q es bastante bastante fuerte y un pcoo triste :(

--------------------------------------------------------------Cuando te hacen daño, o lo apagas, o te destruyen--------------------------------------------------------------

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-------------------------------------------------------------
-Cuando te hacen daño, o lo apagas, o te destruyen-
-------------------------------------------------------------

Povs autor

Una de las cosas por las que Rose nunca había pasado era sentirse acorralada, su buena fe y creencia en las personas le impedía ver las intenciones oscuras con las que muchos la miraban a ella.

Ella ya tenia una sonrisa en la cara, por como caminaba se notaba que iba tranquila pero feliz, sabía que ya había ganado a Fidel y a sus hermanos, y que por la apuesta, en estos momentos, Suga ya estaría firmando el contrato para apoderarse del casino.

Por un lado estaba contenta, terminar y ganar esta misión iba a significar que trabajarían menos para BTS, pero por otro lado, luchaba contra el sentimiento que cada vez era mayor, ese que hacía que se divirtiese haciendo estas cosas con los chicos de BTS, porque sí, hoy se lo había pasado genial haciendo de esposa de Suga.

Se miró al espejo, por fin podía darse cuenta de que las cosas estaban en paz, la idea de haberse juntado de nuevo por un loco mafioso no le aterraba tanto como antes, supongo que ya se había hecho a la idea, pero por alguna razón se sentía segura al lado de ellos. 

Un mensaje de Chanyeol la distrajo por un momento, sonrió al ver la chorrada que le había escrito, era un foto suya, con Sehun y Baek, comiendo en Blomies, la misma comida que pedían cuando eran jóvenes.

El portazo que se escuchó detras de Rose la hizo sorprenderse y girarse de inmediato, tardo en procesar a quien tenía delante -Señor Fidel- le sonrió nerviosa -Este es el baño de las señoritas, creo que se ha equivocado-

La miró con picardía, ladeando una sonrisa y mirándola de arriba a bajo. Cerró la puerta con pestillo, y justo en ese momento Rose sintió un espeluznante escalofrió recorriendo todo su cuerpo, se tensó de inmediato al ver aquella escena, no tenía escapatoria ninguna, pero tenia que pensar con racionalidad y no perder los nervios.

Puso la mano en alto al ver como poco a poco se acercaba a ella. -Te has equivocado de baño señor Fidel- volvió a repetir esperando que cambiase de idea.

-No lo he hecho- dijo seguro, ahora ya la había acorralado contra la pared -En el momento en el que te has levantado de esa mesa ya sabía lo que te iba a hacer-

Su corazón dio un vuelvo justo en ese momento, la piel de gallina y ahora sí que había empezado a temblar -Fidel, escúchame, si te vas olvidaré que esto ha pasado, no sigas- sollozó con el nudo en la garganta. -Eres una persona con reputación, podrías perder todo-

-¡Ya lo he perdido todo por la culpa de tu marido!- le recriminó furioso, tenía unos cambios de humor notorios porque después de un segundo, el rio mirándola con deseo -Muñequita, sabes que nos lo vamos a pasar muy bien tu y yo, pero si te portas mal lo haremos a la fuerza-

𝑸𝒖𝒆 𝒂𝒓𝒅𝒂 𝑺𝒆𝒐𝒖𝒍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora