SEGUNDA PARTE DE RIVALES
Les quitaron el derecho a estar juntas, lo que las mantenían vivas, la oportunidad de ser hermanas para toda la vida, las a obligaron a huir y desaparecer de su hogar.
Pero eso fue hace mucho, hace tres años todo cambió.
So...
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------------------------------------------------------------- -Dime, ¿porque se tiene que acercar el final?- --------------------------------------------------------------
Povs Jisoo
Anoche soñé que estaba de nuevo en Berlín, con mis amigas alemanas de CNPI, Marie me estaba contando que su nuevo novio tenía una casa en Dubái y que nos había invitado a pasar las navidades a las chicas este año, me pareció la mejor idea, en esos momentos no lo estaba pasando bien, añoraba a mis chicas y necesitaba una distracción.
Pero ese sueño se convirtió en una pesadilla, nada más yo despedirme de Susie y ver como Jennie, quien estaba parada delante mío, apareció de la nada con las manos manchadas de sangre y se desplomaba al suelo por un disparo en el pecho, le había dado justo en el corazón.
Empecé a chillar como una loca al querer socorrerla y que no reaccionase, mi visión se fue a Vincent quien al igual que yo estaba aterrorizado, pero estaba siendo esposado por la policía mientras veía el cuerpo de Jennie sin vida en los brazos de V, quien la miraba desconsolado.
Y justo en ese momento me desperté temblando, y con Jin mirándome preocupado.
-¿Una pesadilla?-
Asentí, todavía estaba abrumada por el sueño y no me había despertado del todo ¿Que cojones? yo nunca, nunca, tengo pesadillas.
Y por alguna razón esta pareció demasiado real, y joder, seguía temblando y sudando la gota gorda.
-¿Que era?-
-Nada importante- no quería recordarlo y me tumbé de nuevo en la cama suspirando.
-Bueno- el se tumbó conmigo y me miro mientras yo tenía mi atención puesta en el techo -¿Que quieres hacer hoy?-
-¿Hoy?-
-Si-
Ahora si que me gire -¿No tenemos que trabajar?-
-Muñeca, no me jodas-
Le mire sorprendida
-¿Que pasa?-
-¿Me estás vacilando o enserio no te acuerdas?-
Me quede pensativa, de verdad que no tenía ni idea de lo que estaba diciendo, por lo que negué la cabeza y justo en ese momento se abalanzó sobre mi poniéndome encima suyo.
-Feliz cumpleaños-
Y con eso me planto un fuerte beso en los labios.
Si, era mi cumpleaños y por alguna razón me había despertado sin recordar, supongo que era la costumbre, de que en los últimos tres años las ganas de celebrar mi cumple no existían, hasta el punto de que mis amigas de Alemania no sabían cuando era. Y si, siempre me pasaba mi cumpleaños en mi casa con una buena cena, y en videollamada con las chicas.
