Old Scars / Future Hearts || Bucky Barnes x OC ||

Cap. 4: We'll get him falling for a stranger (Parte I)

Me tome el vaso de whiskey y trate de tomar atención a la conversación que había en nuestra mesa.

Steve había estado de acuerdo con Natasha en salir a un lugar en la ciudad, para salir un poco de las cuatro paredes de la base y habíamos terminado en algo así como un bar/disco. A mi no me molestaba pasar mi noche en las cuatro paredes de mi departamento.

-siempre había querido conocer un lugar de estos- dijo Wanda- aunque no pensé que sería así

-yo no

-pero aún así, terminaste por acompañarnos- dijo Natasha, tomando un sorbo de su bebida- estoy tratando de que Steve salga con alguien, también puedo ayudarte a ti

-no, he tenido suficiente del sigo XXI- dije, tomando mi vaso- iré por más

Me levante y camine hacia el bar que estaba en el primer piso. Natasha había conseguido una mesa en un segundo piso que permitía mantener una vista de todo el lugar, mientras que en el primer piso estaba la pista de baile, junto con el bar. Le señale a la persona del bar que me diera otro vaso y me apoye en el lugar para observar a las personas bailar al ritmo de lo que sea que estaba sonando.

No entendía la música ni el baile. Definitivamente me estaba sintiendo de 106 años.

-Adam! ¡Otro de estos por favor!

Miré a mi derecha, ya que esa voz me resultaba familiar. Era la primera vez que la veía con el pelo suelto, el cual no era un poco mas largo que el mío, ondulado. Traía una polera manga corta de color turquesa, que dejaba al descubierto sus hombros, notando un tatuaje en su hombro izquierdo, que se perdía en la polera y terminaba en su brazo. Sus pantalones eran negros, ajustados, como los que solía usar en el trabajo y aunque no era grande el cambio de como se veía en el trabajo, no podía negar que el delantal no hacia justicia a su apariencia.

-me resulta familiar esa mirada juzgadora- escuché y salí de mis pensamientos. Vi como giró sobre sus talones y miro en mi dirección- Barnes!

-te he dicho que me digas Bucky- dije, negando con la cabeza

-no, porque en estricto rigor eres mi jefe- dijo y sonrió- estoy sorprendida de ver a alguien como tu en un lugar como este

-me arrastraron aquí- dije. Justo en ese momento, el barman me tendió mi vaso

-una pena

-también estoy sorprendido de ver a alguien como tu por estos lados- dije, tomando un sorbo de mi vaso

-porqué soy una rata de laboratorio? Nah, a veces me gusta embriagarme y salir a bailar

-veo que hay mucho que no conocemos el uno del otro

-no me sorprende, siempre terminamos discutiendo- dijo. Tomo mi mano con el vaso y tomo un sorbo de mi bebida, sin quitar la vista de mi- disfruta Barnes- se acerco a mi oreja- hay una chica bonita que no te ha quitado la vista de encima

Se fue a la pista de baile y la perdí en la multitud. Miré hacia un costado y vi a quien supongo se refería Samantha, ya que levanto su vaso en forma de saludo. Negué con la cabeza y volví a donde estaban mis compañeros, los cuales se reían de alguna cosa.

Mantuve mi atención en el grupo de gente que bailaba debajo de nosotros, intentando encontrar a Samantha entre la gente. A veces la divisaba y veía como bailaba al ritmo de la música o simplemente pasando un buen rato, para luego volver a perderla.

-Bucky- Sam toco mi hombro para llamar mi atención- hace un buen rato que no quitas la vista de la pista de baile, puedes ir a bailar, nadie va a juzgarte

-era un buen bailarín en los 40, amigo

-o es que encontraste a alguien que llamo tu atención?- dijo Natasha, mirando hacia la pista de baile. No quería dar explicaciones si encontraba a Samantha

-no

-que aburrido

Trate de participar en la conversación, pero cada cierto tiempo volvía mi atención a la pista de baile. De repente vi a Samantha parada en medio de la gente, mirando hacia una dirección, para luego abrirse paso rápido y salir de lugar.

Algo había pasado.

-disculpen

Me levanté y me abrí paso entre la gente, tratando de salir lo más rápido del lugar y alcanzar a Samantha. Tenía bastante claro que ella no iba a poder defenderse si alguien pensaba hacerle algo y a esta hora de la noche y con alcohol, era mucho más susceptible.

El aire fresco de la noche me golpeo cuando al fin salí del edificio. Busque con la vista, pero no había rastro de ella, así que comencé a caminar hacia la calle que estaba más cercana.

-hey! ¡déjala en paz!

Mi cerebro se demoro unos segundos en reconocer esa voz, así que corrí hacia la calle.

Vi a Samantha pegarle una patada a un hombre que tenía arrinconada a una mujer en la muralla, la cual no paraba de llorar. Los otros tres hombres que acompañaban al tipo se acercaron a Samantha y esta logro esquivarlos, pero uno logro empujarla hacia la muralla.

-no deberías meterte en los asuntos de los demás- dijo, tomándola de la barbilla

-me meto en los asuntos que me da la gana- el hombre levanto la mano para golpearla, pero se la detuve en alto

-yo que tú no la tocaría- dije. El tipo miro en mi dirección

-tu quien eres!?- el olor a alcohol llego a mi nariz- no te metas en los asuntos de los demás

-como dijo la señorita, me meto en los asuntos que me da la gana

Le torcí la mano al tipo y grito de dolor, para luego botarlo al suelo. Sus amigos se balancearon hacia mí, pero no fue complicado noquearlos. Dos de ellos lograron levantarse y salieron corriendo, dejando al resto de sus amigos inconscientes en el suelo. Busqué a Samantha y la vi arrodillada al lado de la mujer, la cual no dejaba de llorar. La mujer levanto su vista y me vio, comenzando a gritar. Estaba completamente asustada y fuera de sí.

-hey, tranquila- dijo Samantha, en un tono que nunca le había escuchado- nadie te va a hacer daño- me miró fijamente- él no te hará daño, no es como esos imbéciles

-yo... trate... él

-nadie te esta pidiendo explicaciones- Samantha comenzó a sobarle la espalda, para que se tranquilizara- tienes como volver a tu casa?

-él estará ahí- la mujer seguía llorando- él sabe dónde vivo

-la casa de alguna amiga?

-es mi ex, él... él dijo que me daría una lección por dejarlo- las palabras de la mujer me hicieron mirar con rabia en la dirección en la que habían escapado los tipos. Di un paso para salir detrás de ellos, pero algo tomo mi mano, deteniéndome

-no- miré a Samantha. Su toque en mi mano se sentía suave, cálido. Me miraba- no

Vaya noche.