De nuevo en la mansión todo estaba en "tranquilidad" está vez Marinette había despierto con marcas de mordidas y con un poco de dolor en las caderas.–Buenos días mi lady–dijo Sebastian.
–Buenos días Sebastian~–dijo Marinette en un tono seductor.
–Mi lady, ¿Le gustaría algo más?–pregunto Sebastian.
–Si–dijo Marinette.
–Bien, creó que tengo lo qué quieres–dijo Sebastian.Sebastian se acercó a Marinette para luego implantarle un beso en sus labios, el beso fue en aumento de cariñoso a apasionante para luego separarse.
–Gracias...Sebbys, jejeje–dijo Marinette riéndose.
–jejeje, ¿Lista para hoy?–pregunto Sebastian.
–Muy lista–dijo Marinette.Una vez despierta y qué Sebastian saliera de la habitación, Marinette se cambió rápido y fue a desayunar. De nuevo en Francia, Kagami y Luka estaban en el parque hablando sobre las cartas de Marinette que les llegó a ellos.
–¿Y bien?–pregunto Kagami.
–No sabía qué el segundo nombre de Marinette es Maribel–dijo Luka.
–Jejeje, tontito, hablo de la carta, no de su segundo nombre–dijo Kagami releyendo su carta de nuevo.
–Ah, la carta, bueno la verdad...no se, digo...crees qué...es buena idea traicionarlos?–pregunto Luka viendo su carta.
–Yo digo qué si–dijo Kagami.
–¿Eh? ¿Estás segura?–pregunto Luka.
–Si...¿Y tú?–pregunto Kagami.Luka lo pensó unos segundos, ¿De verdad quería hacer esto? ¿De verdad valdría la pena traicionar a su hermana y amigos?...¿Lo valía?
–Esta bien...lo haremos–dijo Luka.
–Es bueno oír eso–dijo una voz misteriosa.Ambos voltearon y vieron a aquel mayordomo de negro viéndolos. De regreso a la mansión Phantomhive, Marinette estaba tomando su te en eso llega Sebastian con Kagami y Luka.
–Luka, Kagami, me alegran que hayan aceptado la propuesta–dijo Marinette dirigiéndose a ambos.
–No hay de que Mari–dijo Kagami.
–Si, para ayudarte–dijo Luka.
–Bien, ahora, Sebastian los llevará a sus habitaciones y tendrán que vestirse–dijo Marinette.Sebastian llevo a ambos a sus habitaciones, dejo a Kagami en su habitación y de ahí dejo a Luka en su habitación.
–Dime algo–dijo Luka.
–¿Qué sucede?–pregunto Sebastian.
–Tu...¿Qué eres de Marinette?–pregunto Luka.
–¿Yo? Yo soy su mayordomo y su amante también–dijo Sebastian.
–Oh...entiendo–dijo Luka.Una vez que ambos estaban en sus habitaciones habían unas ropas en las camas y unas armas a un lado de ellas, ambos se pusieron las ropas, agarraron las armas y salieron de sus cuartos.
–Se ven muy listos–dijo Marinette.
–Bien, vamos tenemos que entrenar–dijo Sebastian.
–Si–dijieron ambos al unisolo.Los tres se fueron mientras que Marinette seguía viendo a la venta, toco la ventana con la punta de sus dedos con cuidado.
–Esta es...la venganza definitiva–dijo Marinette.
Acto seguido, cerro su mano en un puño y se fue de ahí a su oficina. De vuelta en Francia, ya era de noche y el miedo se apoderó de todo, ya iban tres adolecentes capturados y si aún pudieran tener la ayuda de Ladybug todo se habría resuelto...lastima...que ella ya no está...Adrien seguía en su cama...culpandose por todo...fue un idiota.
–Adrien!–grito Plagg.
–¿Plagg? ¿Qué pasa?–pregunto Adrien a su kwami.Tikki y Plagg le entregaron una carta en donde empezó a leerla.
Querido gato negro...
Esto ya está empezando, tu y todos pagarán por lo que hicieron...ya todos están aquí y faltas tu! Te estaré esperando para enfrentarte mano a mano...
Atte
Marinette Maribel Phantomhive.El leer la carta de enojo un poco, sabía que todo era su culpa pero Marinette se había pasado de la raya.
–¿Qué haremos?–pregunto Tikki.
–Es fácil–dijo Adrien.
–¿Qué haces?–pregunto Plagg viendo a Adrien agarrar varios prodigios.
–Muy fácil...iré a salvar a mis amigos, Plagg! Las garras!–dijo Adrien.Ya es tiempo, cuando llegue a la mansión todo se acabó...su tiempo, su vida...todo se acabará una vez llegue a la mansión.
Continuará...
ESTÁS LEYENDO
Condesa Phantomhive (Marinette x Sebastian) (Terminada)
FanfictionMarinette "Dupain Cheng" así se le conocía a ella pero...¿esa es la verdadera ella? después de que Lila hiciera que ella llegara a un límite Marinette la abofeteo en frente de todos, pero las verdades salen a la luz después de tantos años. Miraculou...