Magia Mental #1 (Taekook/Vkook) / Adap.

Capitulo 17

Jungkook abrió los ojos y parpadeó al techo. Podía oír los gruñidos junto a él y se volvió hacia Taehyung.

—Ha desaparecido —sonrió. Ya no sentía la presencia de la oscuridad en su mente.

—No ha desaparecido —dijo Jin desde su sitio en el suelo. Sostuvo en alto la piedra, ahora veteada de rojo—. Está atrapado.

Jungkook intentó sentarse y volverse para poder ver. Taehyung le ayudó a enderezarse, pudiendo así mirar a Jin.

—Gracias.

—Ahora, ¿por qué no vemos si podemos rastrear esta cosa hasta su fuente y así terminar con esto? —Jin se puso en pie, y Yoongi alargó el brazo para estabilizarle—. Gracias, lobo.

Yoongi gruñó, y Jungkook no pudo evitar que se le escapase una carcajada.

—Me siento realmente bien —dijo, y se río de nuevo. Taehyung acarició la espalda de Jungkook, y este se volvió para mirarle a los ojos. Compartieron una mirada encendida, y Jungkook tuvo que morderse el labio para contener un gemido. Dios, se sentía muy, muy bien.

—Deberías. —Jin levantó una pieza de terciopelo purpura del armario y envolvió la piedra—. Lo que hiciera esto era fuerte, pero la magia se estaba debilitando. Necesitamos encontrarlo, ahora, antes de que pueda hacer nada más.

Jungkook accedió. Si podían encontrar al demonio y terminar con la situación, cabía la oportunidad de poder defenderse ante el Consejo.

—Estoy listo —dijo, y se bajó de la mesa. Sus piernas se doblaron, pero Taehyung le puso un brazo en la cintura para sostenerlo.

—¿Puedes encontrarlo utilizando la piedra? —Taehyung sonaba incrédulo.

—Puedo —replicó Jin—, de la misma forma que tú puedes encontrar a tus lobos utilizando tu magia. Puedo encontrar a otros seres que utilizan magia del alma utilizando la mía. Especialmente si tengo una muestra de su magia en la mano.

Jungkook observó como Jin reunía unas pocas cosas. Se subió una manga y se ató una cinta de cuero, para luego tomar una segunda daga de la pared y ponerla en la funda de la muñeca asegurándose de que estuviera fija. Varios cristales dejaron el armario para ir a sus bolsillos antes de que anunciara estar listo.

Taehyung y Yoongi aún tenían las manos parcialmente transformadas, así que no necesitaban ninguna arma. Jin miró a Jungkook y volvió al armario para coger otro cristal. Lo envolvió con cable de plata y lo puso alrededor del cuello de Jungkook. Torció los extremos del cable para que se quedara en su sitio.

—No te lo quites, Jungkook, y recuerda de que este demonio ahora está sintonizado con tu magia. Sera más fácil que se adhiera a ti por segunda vez. Tiene que estar desesperado si está haciendo este tipo de hechizos.

—Lo entiendo. —Jungkook puso la mano sobre el collar y sintió una sensación de seguridad. Le dio un leve apretón y susurró un agradecimiento silencioso por su protección. Se volvió hacia Taehyung, medio esperando que él protestara. A diferencia de los demás, estaría desarmado, únicamente con su magia para protegerle. Taehyung no dijo nada, y Jungkook no quiso mencionar el hecho.

Dejaron la casa de Jin, con el vampiro reemplazando los hechizos de cada puerta mientras las atravesaban. Jungkook quería aprender cómo hacerlos, quería ser capaz de protegerse a sí mismo y a su casa. Casi se detuvo en seco cuando su mente no le transportó a su pequeña cabaña, sino a la casa de Taehyung en el recinto.

Taehyung condujo de nuevo, pero esta vez Jin iba el asiento del copiloto. Jungkook y Yoongi se sentaron en la parte de atrás. Jin dio indicaciones a Taehyung, tan vagas que eran generalmente sólo una dirección.