Taehyung se concentró en seguir las indicaciones que Jin le había dado mientras centraba parte de su atención en Jungkook. No le gustaba lo callado que se había quedado tras conocer que Jin era el misterioso vampiro que buscaban. Podía sentir el dolor de Jungkook resonando a través de su vínculo y no quería hacer otra cosa que confortarlo.
Todo lo que podía hacer era seguir asiéndole la mano mientras continuaba conduciendo. Jin necesitaba responder las preguntas de Jungkook, y esperaba que también tuviera las respuestas que ellos necesitaban.
Mientras conducía hacia la entrada de la dirección que Jin les había dado, Taehyung inclinó la cabeza a un lado y miró con atención. Había imaginado que la casa de un vampiro tan viejo como Jin sería, bueno, tan vieja como Jin. Puede que algo oscuro y misterioso que no dejase pasar la luz del sol. Algo escondido donde no pudiera ser encontrado con facilidad.
Ese no era el caso. La casa de Jin estaba en lo alto de una ladera. Era una casa de construcción nueva con un tejado abovedado y una fachada frontal hecha por completo de ventanas. Esta construida de una piedra de un color gris pálido, lo que Taehyung apreciaba, pero las luces del jardín y el estado cuidado de este hacía que los visitantes se sintieran bienvenidos, en vez de asustados.
Jungkook también se dio cuenta. Se sentó derecho en el asiento y miró alrededor con confusión y algo de admiración. Incluso Yoongi se había echado hacia delante entre los asientos para mirar con más atención. No había una puerta o verja impidiendo que condujeran directamente al frente de la casa, así que eso es lo que Taehyung hizo.
La puerta de madera oscura de la casa se abrió cuando Jin se apresuró a salir, y Taehyung experimentó otro instante de sorpresa. El vampiro parecía tener unos treinta años y tenía el pelo castaño corto y algo ondulado. No era muy alto ni estricto en apariencia. Taehyung pensó que Jungkook debía ser unos cinco centímetros más alto que él como mínimo. Ni siquiera su ropa daba ninguna pista de que era viejo y poderoso. Sus jeans parecían nuevos, y llevaba una simple camiseta azul.
Jin abrió la puerta de Jungkook y le miró de arriba abajo. Taehyung no estaba impresionado con el obvio intento de Jin de asegurarse de que su descendiente estuviera a salvo en compañía de lobos. Taehyung luchó por contener un gruñido mientras salía del coche, y se obligó a sí mismo a permanecer tranquilo. Yoongi le siguió, y juntos rodearon el coche para reunirse con Jungkook, quien aún parecía estar atónito. Taehyung cogió la mano de Jungkook, ante la aparente molestia de Jin.
Jungkook no pareció darse cuenta de la tensión, lo que no era propio de él. Desde su primer encuentro, Jungkook siempre se había percatado de las emociones de los que le rodeaban, de igual forma que había oído los gritos de ayuda de los cachorros. Taehyung pensaba que la sensibilidad de Jungkook con los demás era debido a que su magia le hacía más consciente de los sentimientos de los que le estaban a su alrededor. Se recordó que la magia de Jungkook estaba afectada y que Jin era la única pista que tenían en ese momento para ayudar a Jungkook a volver a la normalidad.
Taehyung apretó la mano de Jungkook, que volvió la suya para entrelazar sus dedos con los de él. El movimiento no pasó desapercibido a Jin y su ceño fruncido se acentuó. Se volvió a Jungkook e intentó relajar la expresión en su rostro.
—Bienvenido a mi casa, Jungkook. Me gustaría que fuese bajo mejores circunstancias.
—Gracias —replicó Jungkook, con la voz inusualmente ronca.
Jin se volvió hacia Taehyung y le dedicó un gesto de cabeza.
—Alfa Taehyung.
Taehyung devolvió el gesto.
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Magia Mental #1 (Taekook/Vkook) / Adap.
Fanfic«Las especies mágicas no deben mezclarse jamás». De acuerdo a las normas, Jeon Jungkook debería ignorar los gritos de ayuda de los niños. Después de todo son cachorros de hombres-lobo, y él es aprendiz de mago. Pero, por primera vez en su vida, Jung...