capítulo 14

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Eva

—buenas tardes señorita Barreiro, se haya usted delante de la sheriff Gilabert y de la comandante Gurbindo, espero que pueda responder unas cuantas preguntas para saber si es culpable del caso o no - dice sam poniendo una voz grave forzada-
—vais en serio?
—no, la verdad, pero era para hacerlo mas interesante -dice riendo y sentándose a mi lado del sofá cosa que hace también Mai-
—puedes empezar bichito, estoy preparada
—pero es que no tengo nada que contar!
—Eva tía no somos tontas
—A ver...puede que me guste un poco Hugo
—VES! LO SABIA - dice sam- seremos amigas de hace poco pero te conozco como si te hubiera parido
—y puede que...nos hayamos besado un par de veces...
—que dices! -dice sam emocionada-
—si... -digo en voz baja- mai...di algo
—mira sirenita, yo sinceramente no sé los sentimientos de mi hermano, el nunca se ha enamorado de una persona 100% y si te digo la verdad dudo que en ese aspecto haya cambiado, no lo digo por hablarte mal de el ni por quitarte la ilusión pero es que yo de toda la vida lo he conocido así, y me cuesta creer que haya cambiado, pero, si veo que es cierto, apoyo muchísimo vuestra...¿relación? No sé, lo único que quiero es que no te haga daño porque para mi ya eres como una hermana y no me gustaría tener que posicionarme en algún extremo de los dos...
—que bien habla cuando quiere -dice sam intentado relajar el ambiente-
—yo...no sé que siento, es decir, nunca me he sentido algo así por nadie, se que suena a lo típico pero es verdad, no quiero que me dañe pero no puedo hacer otra cosa que lanzarme a la piscina sin ver si esta llena o vacía, porque hugo es indescifrable
—ya...tu de todas maneras fíjate en sus actos, el es de pocas palabras y mas de hechos, además de que es muy transparente y por suerte o por desgracia se le nota todo en la cara, entonces si te miente o si huele raro lo vas a notar
—opino igual que Mai -dice sam comiendo palomitas-
—mírala, nosotras aqui con la garganta seca de hablar y ella mientras hinchándose a chuches -digo riendo-
—tenia hambre, así soy

La tarde transcurrió normal, vimos muchas películas y hablamos de miles de cosas, entre ellas los amoríos de mis dos amigas. Sam según ella se había flechado por el amigo de Hugo, Flavio se llamaba, y Maialen le había parecido guapo un chico que conoció por Instagram y que estaba en la Uni, Bruno.

Estábamos las tres mirando nuestros móviles cuando de repente Sam pega un salto enorme del sofá dándonos un susto de muerte.

—que pasa! -digo alarmada-
—me acabo de acordar, mis tíos me invitaron esta semana que tenemos de vacaciones a su casa y todavía no he echo ni la maleta...sabéis lo aburrido que va a ser estar allí? Con suerte estarán mis primos que son de nuestra edad y puedo hablar con ellos pero...que muermo
—ya te digo... -dice maialen bostezando-
—oye y si... - de repente mi amiga rubia me mira a mi con un destello en los ojos y se perfectamente que se le ha ocurrido-
—no estarás pensando lo que creo que estas pensando
—si! podemos ir todos! Es un pueblo al lado de la playa, podríamos pasárnoslo pipa!
—tenemos que estudiar...
—ay eva no seas aguafiestas, será divertidisimo! a que si mai?
—eh? - dice mai saliendo de su móvil-
—tu di que si
—si
—ves -dice sam riendo- se puede venir bruno, hugo, flavio, mai, tu y yo!
—no crees que molestaríamos a tus tíos?
—que va, si ellos apenas se pasan por casa debido a su trabajo
—no sé yo...
—ya esta dicho, nos vamos al mar! ya podéis estar haciendo las maletas, tu -dice señalando a mai- avisa al tal bruno ese y tu - dice señalándome a mi- avisa a hugo, mañana a las 9 de la mañana os quiero a todos despiertos que nos vamos para Ibiza
—ibiza!? -dice mai asombrada-
—no os lo había dicho pero mis tíos tienen bastante pasta
—pues para Ibiza se ha dicho

Lo que quedaba de tarde la pasamos haciendo maletas y yendo de una habitación para otra sacando y metiendo ropa, además nos llegamos a la habitación de Flavio y de Hugo, que se habían enterado del viaje por Sam. Vi a Hugo bastante emocionado, y eso que no lo conozco del todo, pero si podía ver que en ese instante estaba feliz de ir a ese viaje.
Para medianoche ya teníamos todas las maletas echas y todos estábamos ya en nuestra habitación intentando conciliar el sueño, cosa imposible, ya que mañana teníamos un vuelo que nos llevaría a una gran aventura y mucha fiesta. Si preguntáis por los tíos de sam, les sobrara el dinero para comprar pasaje para todos, y eso hicieron, según ellos le seriamos de compañía a una tal Valentina y un tal Leo, en fin, cosas de familia.

Te quiero siempre • Eva y Hugo •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora