CAPITULO 3

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Gianny 17

Terry la vio alejarse paso a paso cuando de pronto se giró para mostrarle una sonrisa y con una reverencia prosiguió su camino, pero solo eso le basto a él para darse el permiso que necesitaba, aquella chica lo deseaba como el a ella, esa era una oportunidad que no iba a desperdiciar, con una sonrisa y a paso ligero la siguió.

Había una multitud de gente que muchas veces le cerraban el paso pero aun así él se mantuvo firme y fue tras ella, nada ni nadie le impedirían estrecharla en sus brazos, de pronto la vio perderse en la multitud de danzarines y cuando logro divisarla vio como un hombre se le acercaba y le ofrecía la mano para bailar, Terrence sin pensarlo dos veces se encontraba arrastrándola hacia el grupo de danzarines, la tomo por la cintura con una mano mientras que con la otra cubría por completo su delicada mano.

----Supongo que esto significa que me invitas a bailar ¿verdad?.- Dijo burlona la joven.

----Si no es eso, no sé qué será.- Respondió con el mismo tono.- Aunque debo advertirte que lo mío no es la música del siglo XV, pero prometo hacer mi más grande esfuerzo para complacerte.- Candy pudo ver como un brillo se colaba en sus ojos haciéndola estremecer.

¿Qué era todo aquello?

----Oh...no diga eso.- Le mostro una sonrisa pícara.- Suelo ser muy difícil de complacer.- Lo que provoco que él riera a todo pulmón.

----Bueno, creo que eso tendré que verlo

Candy se sentía abrumada con su presencia, nunca antes había estado en tal estado y eso la preocupaba ¿Qué podía suceder si no media sus acciones y palabras?...DIOS NO QUIERA.

----Temo que tendré que dejarlo.- Respondía Candy al sentir que la presencia de aquel hombre la ponía nerviosa, Terry que al escuchar aquello se alejó de ella para observarla y finalmente decirle al oído.

----No lo hagas...tu deseas esto igual que yo.

----No me acostare con usted. - Terry solo esbozo una sonrisa y volvió a susurrarle.

----No te lo he pedido.

Ante aquellas palabras Candy sintió una punzada de decepción.

¿Qué solo ella deseaba eso?

Bueno entonces le iba a mostrar a aquel hombre que ella también podía infundirle deseos.

---Muy bien entonces ...¿deseas jugar conmigo?.- Le dijo mientras rozaba con sus labios su oído, Candy sintió como se estremecía ante su contacto.

----¿Jugar?¿Qué clase de juego?.- Preguntó con voz trémula.

----Harás lo que yo te diga hasta la media noche, después te daré dos premios.

---¿Ser tu esclavo?

---No serás mi esclavo...serás mi leal y fiel seguidor.- Terry guardo silencio por un momento y analizó cada palabra de ella.

---¿Por qué solo dos?

----Créeme que con dos serán suficientes para ti...¿Aceptas?

----¿Qué te hace pensar que no me aprovechare de los deseos?

----Oh no lo harás ...yo me encargare de eso. - A Terry le fascino aquella seguridad que tenía, quería ver cómo diablos se las ingeniaría para mantenerlo a raya.

----Acepto ...su alteza.- Dijo para después morder sutilmente su hermoso cuello.

----Muy bien...entonces .- Rodeo con los brazos el cuello de Terry y siguió hablando quedamente.- Primera orden: No puedes tocarme con las manos.- Aquellos hizo que Terry se paralizara por completo ¿Cómo que no podía tocarla?...iba a objetar aquella orden cuando una idea llego a su mente, no deseaba que empleara las manos pero podía emplear otra cosa, sin demora rozo su mejilla con la ella e hizo recorrer sus labios por su cuello...OH DIOS ...estaban en público y deseaba apretarse a ella para que pudiera sentir su dureza, dejándose llevar por el momento deslizo sus labios hacia los de ella... ¿y si la besara?

¿QUIERES JUGAR?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora