06. Despedida

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Estaba muy emocionada por mi salida con André, tanto que estuve un día antes, preparando lo que fuera necesario para nuestra salida.

–Davina, hija qué estás haciendo?- Preguntó mi madre, al ver mi extraño comportamiento, caminando de aquí para allá, buscando cosas.

–Hoy saldré con André, mamá– Contesté intentando ocultar la emoción que me provocaba que todo haya vuelto a la normalidad, hoy le diría que lo quería y que lo intentáramos, porque su distancia me estaba matando, no podía seguir así.

André.

Duele, pero es lo mejor, luego de que Davina me dijera que era mejor dejarnos llevar, algo dentro de mí, se quebró.

Pero, que creías? Que dejaría todo por estar contigo?

Vaya, gracias consciencia.

Había tomado mis distancias con ella, creo que más para no salir herido, que para darle espacio y tiempo para aclarar sus ideas. No podía ir a verla a su casa y hacer cómo que nada pasó, cuando en realidad estaba muriendo por dentro, cuando me mataba verla reír y saber que no era por alguno de mis chistes.

Decidí irme, de vuelta a Francia, hasta que pudiera volver y ya no sentir nada por ella.

Combien disent là-bas, je t'aime, mais je t'ai laissé partir.

Los días estaban transcurriendo con normalidad, pero no podía dejar de pensarla, de extrañarla y querer estar con ella, así ella no quisiera estar conmigo, así fuera cómo amigos, quería estar con ella, porque mi sentimiento por Davina, superaba todo aquello que alguna vez llegué a sentir.

–¡André!!– Dijo Ulises– ¿Me estás escuchando?

–No, Ulises– Ulises, mi mejor amigo, se encontraba diciendo algo, a lo cual no le estaba prestando atención por andar divagando en los pequeños y oscuros rincones de mi mente, en los que se encontraban los vagos recuerdos de Davina, todas las veces que estuve con ella en ese corto tiempo.

–Aún piensas en ella, no?– Asentí en respuesta– Deberías volver, estar con ella, tal y cómo quieres.

Pero no era tan sencillo, conllevaba muchas cosas, no estábamos listos para estar juntos, aunque sabía que no era correspondido. No podía regresar cómo si nada hubiera pasado, cómo si ella nunca hubiera dicho que nos dejáramos llevar y ver qué pasaba, sabiendo que eso podría llegar a herirme, todo aquello que logró decirme, consiguió que cuando tuve que marcharme no fui capaz de darle una despedida, ni un cierre a toda esta situación.

Davina.

Tristeza, eso sentí cuando mamá me informó sobre la partida de André a Francia, me sentí devastada, herida, pero sobre todo traicionada. Se suponía que todo estaría bien otra vez, que le diría que lo quería, que nos daríamos una oportunidad y estaríamos juntos, pero no fue así. Todo tuvo que irse a la mierda con su partida.

*Combien disent là-bas, je t'aime, mais je t'ai laissé partir: Cómo dicen muchos por ahí, te amo, pero te dejo ir.

Mi Divino Tropiezo (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora