André.
Ya todo lo del incidente había sido superado por ambos. Ella está siendo más feliz que nunca, y no me molestaba; yo también lo era. 14 de septiembre, dos días para su cumpleaños. Tomé la decisión de regalarle un viaje, para despejar su mente luego de tanto caos, el destino de dicho viaje sería sorpresa para ella, al igual que lo que venía durante el mismo.
–¡Davina, cariño, ya estoy en casa! – Avisé a penas crucé el umbral. Cuando apareció en mi campo de visión, corrió cómo niña pequeña hacia mí y se lanzó en mis brazos para besarme efusivamente y con vehemencia.
Davina se encontraba estudiando a distancia, por todo lo sucedido, mientras que yo tenía que salir cada mañana a clases y así poder titularme.
Ese día conseguí salir con esa excusa, pero la verdad era que había salido a comprar nuestros boletos de avión.–Dentro de dos días es tu cumpleaños, ¿Qué tienes pensado hacer, cariño?
–No lo sé, aún no he pensado en eso, ¿Tienes algo pensando, André?
–¡Viajaremos! – Mi entusiasmo podía confundirse con el suyo; ambos dábamos saltitos de alegría con lo anunciado.– Pero ya, no daré detalles, aunque, empaca ropa ligera hará un poco de calor en nuestro destino.– Davina hizo un pequeño puchero para intentar convencerme de decirle a dónde iríamos, sin embargo, teniendo claras sus intenciones; sólo solté una sonora carcajada, logrando rápidamente que Davina se cabreara y me propinara un fuerte manotazo en el antebrazo.
–¡No te rías, grandísimo imbécil!
–Vale, vale, no me reiré, pero tampoco diré nada – Dije comprimiendo fuertemente mis labios para contener la gigante carcajada, que liberé al llegar a la habitación.
15 de septiembre 4:00pm aeropuerto de Moscú/Rusia:
Eran las 4:00pm. Davina estaba haciendo un montón de preguntas sobre nuestro destino, el cual no había revelado aún.
Si queríamos llegar a tiempo al lugar dónde pasaríamos su cumpleaños debíamos partir antes de las 5h, porque el vuelo duraba aproximadamente 7 horas y media.
Al cabo de un rato sin responder las preguntas de Davina, ella decidió empezar a comer su budín de Choco-fresa con maní; su favorito, mientras esperábamos el llamado del vuelo.
7h y media después; Santorini-Grecia:
Davina se hallaba fascinada por todo el paisaje, la había traído hasta acá para hacer de su cumpleaños número 22 una fecha inolvidable.
–¡Es Santorini! ¡André estamos en Santorini!
–¡Sorpresa!
Davina.
Santorini era algo increíble, era realmente hermoso; sus calles, la vista al mar, toda la arquitectura, este sería sin duda alguna el cumpleaños que jamás olvidaría.
–¡Joder André! ¡Esto debió costarte un montón!– Exclamé realmente emocionada. Si no hubiéramos estado en el auto camino al hotel, estaría dando saltitos.
–Cariño, mereces esto y más, lo haría de nuevo sin dudarlo.
Y aquellas palabras salieron de mi boca automáticamente.
Aquellas palabras con tanto peso y tantas consecuencias, salieron sin pensarlo:
–Te amo, cariño – Fue lo que dije mientras subíamos al ascensor camino a nuestra habitación correspondiente.
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Mi Divino Tropiezo (En Proceso)
Roman d'amourLa típica historia de amor, se amaban, lo demostraban, o eso aparentaban. Davina, mujer fuerte que fue víctima de un amor. Él, era atento y la amaba o eso demostró al principio, porque, luego todo se puso en duda. Podrán pensar que es una historia d...