Tu nuestra y nosotros tuyos. (En Corrección)

Capitulo 8

Editado.

Maratón 1/2

Ayer caí rendida a mi camina, ni si quiera recuerdo a que hora se fueron los chicos, solo se que debo entregar mi tarea a tiempo y después pasar a mi trabajo.

--Hank, crees que puedas dejarle mi trabajo al profesor Lancaster en su mesa, no quiero llegar tarde al trabajo, es que tu entras una hora tarde, ándale ¿si? --dije haciéndole un puchero.

Hank asintió y yo le bese la mejilla, rápidamente me puse el uniforme y vi como estaba el bebe, lo puse en el carrito y llene la pañalera.

--Hoy tu vienes conmigo amiguito --murmure mientras lo cambiaba.

*****

Ya eran las cuatro de la tarde y un faltaba mucho para terminar mi turno, Oliver comenzó a llorar y olí su pañal para ver si era eso, pero no, tendrá hambre, prepare un biberón y la leche en polvo, cuando me asegure que era comestible para el se lo di.

--Aisha --me llamo Aris --mira a esos bombones suecos que acaban de llegar, están buenísimos.

Voltee a la dirección que su dedo señalaba y vi a los hermanos Cox en la mesa 7, estos chicos me los encuentro hasta en la sopa.

Bendita sea la sopa, AMEN.

Aris se bajo el escote y camino hacia su mesa, les atendió y guiño un ojo, y sin poder evitarlo, eso me causo un poco de repelió.

A NO HERMANA, CONSIGUETE A LOS TUYOS.

--Son tan guapos.. --llego suspirando.

--¿Cuál es la orden? --pregunte un poco irritada.

--A si, la numero cuatro, con fresas y cerezas.

La orden numero cuatro consiste en un pastel de chocolate con lo que deseara el cliente, comencé a prepararlo y agregue un poco de glaseado a los tres en el plato y encima de el cerezas y fresas, cuando estaba por terminar Oliver comenzó a llorar otra vez.

--¡Hank!! --grite para que viniera.

--Mande.

--Por favor, termina de decorar el pastel a como lo apunte aquí --señale mi cuaderno de cocina.

El asintió y yo camine hasta Oliver, su pañal estaba sucio a si que tuve que encaminarme hasta el servicio de los empleados, cuando termine de limpiarlo lo arrulle para poder continuar trabajando.

--Esto ya esta --me enseño Hank.

Aris llego y tomo las rebanas del pastel para los chicos.

*****

Dos horas mas tarde y solo faltaba una para que saliera, Hank tuvo una emergencia familiar y salió antes, pidiendo que lo llamara por cualquier cosa.

--Aisha, los tres chicos, los que te señale hace unas horas, ¿los recuerdas? --me susurro Aris.

Asentí con la cabeza y ella suspiro.

--Lo que tienen de guapos lo tienen de amargados, lo intente todo y solo eran serios y cortantes.

Ella hizo un pequeño puchero con los labios y me miro con ojos de cachorritos, regreso su vista a los hermanos Cox y suspiro.

--Una pena, tal vez son gays, suerte para Hank.

Tal vez eso no debió alegrarme tanto como lo hizo, pero ahí estaba yo tratando de ocultar una sonrisa, que por suerte, no noto ella.

--Y les gustaron las rebanas de pastel, quieren uno para llevar.