" -Yo... No puedo escucharte. "
La vida de Mitsuba era miserable, de un día a otro no podía escuchar El trinar de los pájaros. Pero las cosas cambiarían cuando una " luz " llegará a su vida.
• Deaf ! Mitsuba au
• Au dónde todxs están vivos y viven e...
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« ⚠️ : Ataque de pánico, sobrepensamientos abrumadores, ansiedad. »
" ¿Soy de lo peor? "
El sentimiento de culpa, acompañado por las palabras de Teru, era lo único en lo que podía pensar, como si de un bucle se tratara.
Dirigió su cabeza hacia abajo, los aparatos auditivos de Mitsuba, quien le había pedido que los cuidara para irse a bañar. Su padre le había dicho desde pequeño que fuera bueno, su padre amable, ¿Acaso no era lo suficientemente bueno?, ¿Era una mala persona?
Aquel pensamiento comenzaba a corroerlo, comenzando a hiperventilarse, corrían lágrimas desesperadas por su cara, era una mala persona.
Incluso si es que no lo fuera, lentamente comenzaba a convencerse de ello. Su hermano era nunca se equivocaba, y si era una buena persona, y si siempre tenía la razón, ¿Cuál era la diferencia está vez?
En su cabeza se comenzaba a filtrar un pánico irracional, ¿Y si no estaba haciendo las cosas bien? El tenía razón, solo era un niño caprichoso, no era lo suficientemente bueno para su familia, y esa era la verdadera razón por la que no quería regresar, el no era digno de estar allí, por eso su madre no lo quería, ahora todo hacía sentido para el.
La última vez que escuchó el "te amo" de su madre, lo que su hermano le dijo, y el no ser lo suficientemente bueno comenzaba a invadirle con más fuerzas, el no era bueno, nunca lo fue, les había fallado a todos, era el más ineficiente, era el peor.
Llevó sus ya temblantes manos a su cabello, buscando donde dejarlas, su hiperventilación aumentaba al igual que sus latidos, lentamente comenzaba a mariarse y sentir un punzante dolor en el pecho. Todo lo indicaba, estaba teniendo un ataque de pánico, sin saberlo.
Mitsuba, sin saber lo que ocurría, entro a su habitación, mientras sacudía su mojado cabello con una toalla, de forma despreocupada. Se estiró.
-Kou, ya... -Al ver la escena, se acercó a el inmediatamente-. K-kou.
El ya había pasado por eso, ya había por ataques de ansiedad en el pasado, en efecto, habían sido bastantes, y aún así en ese momento parecía haberse bloqueado, sin saber que hacer, era un lienzo en blanco.
- ¡Hey! ¡¿Estás bien?! - "Por supuesto que no lo está imbécil, mierda Mitsuba, que inteligente eres. " pensó, para a continuación sacudirlo, haciendo que el contrarió solo se mariara más de lo que ya estaba. Solo la estaba cagando.
El de hebras rosa decidió calmarse y pensar con claridad, inhaló, y exhaló. Lentamente recordaba que hacía el para calmarse en esa especia de casos, había leído en internet que hacer, también. Ahora era hora de aplicarlo.
-¡Kou! -Gritó con fuerza, o eso esperaba, realmente no sabía cómo se había escuchado eso, pero deseaba que fuera así. Parece que había funcionado, ya que tuvo la atención del rubio por unos minutos, los cuales aprovecho. Soūsuke levantó una de sus manos, -la otra en la cara de Kou-, y señalo con ella el número 5-. Dime cuantos dedos ves.
